La parada programada estaba inicialmente prevista para el año pasado, luego de que la refinería Esmeraldas presentó serios problemas técnicos que pusieron en riesgo su operación, pese a que fue sometida a un previo proceso de rehabilitación durante el gobierno de Correa.
Quito. La mayor refinería de Ecuador, de unos 110.000 barriles diarios de capacidad, entrará el viernes en una parada programada por 54 días para mantenimiento de varias de sus unidades, lo que implicará la disminución de su producción a la mitad, informó el lunes la petrolera estatal Petroecuador.
La parada programada estaba inicialmente prevista para el año pasado, luego de que la refinería Esmeraldas presentó serios problemas técnicos que pusieron en riesgo su operación, pese a que fue sometida a un previo proceso de rehabilitación durante el gobierno del expresidente Rafael Correa.
"El viernes 01 de marzo arranca el mantenimiento programado de las unidades No Catalíticas 1 y Catalíticas 1. El proceso de mantenimiento se realizará de manera secuencial o por fases durante 54 días, con posibilidad de extenderse", dijo Petroecuador en un comunicado.
"La refinería no paralizará todas sus operaciones, ya que el segundo tren de refinación seguirá procesando hasta 55.000 barriles de crudo por día, contribuyendo al país con la correspondiente producción de derivados", agregó.
Las autoridades han dicho que el crudo que no será procesado durante el mantenimiento de la planta se colocará en el mercado a través de "ventas spot" y que realizará la importación de diésel, naftas y gas licuado de petróleo (GLP) para abastecer la demanda interna.
Esta reparación tendrá un costo de unos US$18 millones, añadió en el comunicado.
El presidente Lenín Moreno sometió a la refinería Esmeraldas y otros proyectos petroleros clave a un proceso de análisis técnico y económico por parte de empresas extranjeras.
En el proceso fueron identificadas fallas y que se incurrió en un costo mayor al previsto originalmente en la rehabilitación aplicada por Correa, que alcanzó a unos US$2.200 millones.
El informe determinó que la planta refinadora requiere cambios estructurales que demandan una inversión adicional de US$172 millones.
Ecuador, uno de los socios más pequeños de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), cuenta con otras dos refinerías pequeñas, que no logran abastecer el mercado local.