En total, 41 estaciones presentan múltiples daños, 17 tienen deterioros menores y seis trenes resultaron con algún desperfecto, desde el inicio de los disturbios en la capital chilena, que se generaron en contra del aumento del pasaje.
Santiago. Una serie de estaciones de diferentes líneas del Metro de Santiago resultaron con varios daños, producto de los destrozos e incendios que les provocaron incluso deterioros en sus infraestructuras, sistemas eléctricos, de comunicación y señalización.
De acuerdo a un documento que envió el gerente general de Metro, Rubén Alvarado a la Comisión para el Mercado Financiero, la Línea 1 del sistema volvería a estar completamente operativa “antes de marzo de 2020”, teniendo en cuenta que la estación San Pablo sufrió un gran incendio.
Según información proporcionada por Metro a La Tercera, la recuperación de la normalidad del sistema podría tardar hasta 12 meses. De acuerdo a los datos del medio, de las siete líneas que tiene la red, cinco de ellas sufrieron incendios en al menos de una estación.
Dentro de las que resultaron completamente quemadas se encuentran Los Quillayes, San José de la Estrella, Trinidad, Macul, Protectora de la Infancia y Elisa Correa (Línea 4); La Granja, San Ramón y Santa Julia (Línea 4A) y San Pablo en la Línea 1.
De acuerdo a las estimaciones, por ejemplo, las estaciones Trinidad y Elisa Correa podrían tomar entre seis a doce meses para ser restablecidas. En tanto, La Granja, San Ramón y Santa Julia podrían tomar entre uno a dos meses; y San Pablo entre cinco a diez.
Otros daños. Otras 11 estaciones resultaron parcialmente incendiadas que corresponden a Gruta de Lourdes, Barrancas, Las Parcelas, Pedrero, Cumming, San Joaquín, Pudahuel, Laguna Sur, Del Sol (Línea 4); República (Línea 1) y Vespucio Norte (Línea 2) que tardarían entre uno a dos meses de reparación.
En total, 41 estaciones presentan múltiples daños, 17 tienen deterioros menores y seis trenes resultaron con algún desperfecto (cinco de la Línea 4 y uno de la Línea 1).
De acuerdo a antecedentes de Ariel López -ingeniero de transportes, miembro del Núcleo Milenio Movyt y del Instituto Ferroviario- se necesitarían entre seis a doce meses para tener la red funcionando de manera completa.
La ex ministra de Transportes, Paola Tapia, explicó que “la prioridad debería ser la señalización y el sistema eléctrico. Si se habilitan los túneles, las estaciones pueden funcionar con la habilitación de torniquetes y cajas provisorias. Los casos más graves tomarán más tiempo, pero, sin duda, hay líneas y estaciones para habilitar en un corto plazo”.
Por tercera jornada consecutiva, parte de la Línea 1 está operando en horario parcial. A ella se sumaron por primera vez en la semana las líneas 3 y 6, las cuales según el presidente de Sindicato de Trabajadores del Metro, no presentarían daños.