El mejor resultado del grupo mexicano, inmerso en una reestructuración financiera desde junio de 2020 como consecuencia de la pandemia, se debe a la mejora de la demanda doméstica de vuelos.
Aeroméxico registró pérdidas netas atribuidas por valor de 6.991 millones de pesos mexicanos (US$ 347 millones) en los seis primeros meses del año, lo que supone una reducción del 76,6% con respecto a los 29.930 millones de pesos (US$ 1.489 millones) perdidos en el mismo periodo del año anterior, según se desprende de las cuentas trimestrales de la compañía.
El mejor resultado del grupo, inmerso en una reestructuración financiera desde junio de 2020 como consecuencia de la pandemia, se debe a la mejora de la demanda doméstica de vuelos.
Así, los ingresos por pasajes nacionales ascendieron a 6.962 millones de pesos (US$ 346 millones), un 37,1% más. Sin embargo, la facturación de vuelos internacionales se redujo en un 19,3% con respecto al primer semestre del año anterior, hasta los 6.049 millones de pesos (US$ 301 millones).
Con estos datos, la cifra de negocio de la aerolínea azteca entre enero y junio se situó en los 16.863 millones de pesos (US$ 839 millones), un 1,1% más.
Por su parte, los costes operativos del grupo entre enero y junio se situaron en los 14.557 millones de pesos (US$ 724 millones), un 6,8% menos. Los gastos de personales se redujeron un 14%, hasta los 4.938 millones de pesos (US$ 245 millones), mientras que los de combustible se incrementaron en un 14%, hasta los 4.991 millones de pesos (US$ 248 millones); y los de mantenimiento cayeron un 28,2%, hasta 1.590 millones de pesos (US$ 79,1 millones).
En el segundo trimestre, la capacidad de Aeroméxico, medida en asientos-kilómetros disponibles (ASKs) aumentó un 9% en comparación con el primer trimestre, principalmente como resultado de la recuperación del mercado doméstico e internacional. No obstante, al comparar los datos con el segundo trimestre de 2019 la capacidad disminuyó en un 39,2%.
Entre abril y junio, la facturación del grupo se incrementó un 284%, hasta los 10.013 millones de pesos (US$ 498 millones), mientras que la pérdida neta fue de 2.800 millones de pesos (US$ 139 millones), diez veces menos que los 27.422 millones de pesos (US$ 1.364 millones) perdidos en el mismo periodo del año pasado.