Pasar al contenido principal

ES / EN

Coca-Cola Andina inaugura en Río de Janeiro su planta más moderna de Latinoamérica
Miércoles, Junio 26, 2019 - 11:32

Duque de Caxias es la onceava planta de la compañía con una superficie de más de 57.000 metros cuadrados y capacidad para producir más de 600 millones de litros de bebidas y aguas al año. La planta es parte del plan de inversión de US$365 millones em 2012-2018.

Coca-Cola Andina inauguró este martes su planta de Duque de Caxias en Brasil, la tercera de la compañía en ese país y la onceava de los cuatro países en donde opera.

Duque de Caxias comenzó a funcionar gradualmente en 2018, y ha permitido más que duplicar la capacidad de producción de bebidas en envases retornables, disponer de agua mineral propia en Río de Janeiro y aumentar la capacidad de producción en envases no retornables en Coca-Cola Andina Brasil.

La nueva planta es parte de un proyecto de expansión de operaciones por aproximadamente US$365 millones en Río de Janeiro que contempló en el período 2012-2018, además de la nueva fábrica, la construcción de un centro de distribución en Cajú; la modernización y ampliación de los centros de distribución de Nova Iguaçu, Campos, San Pedro da Aldeia y Bangú.

También contempla la compra de más de 700 camiones y algunas adaptaciones para la ampliación y optimización de la fábrica de Jacarepaguá.

La planta ocupa un terreno de 2.213 millones de m² en el municipio de Duque de Caxias, adyacente a Río de Janeiro. Se trata de una de las instalaciones más modernas y está bajo el concepto de Industria 4.0, con procesos automatizados y el uso de inteligencia artificial, realidad aumentada y machine learning. 

Todos los sistemas de la fábrica están constantemente generando información que se almacena en base de datos, siendo este el mayor desarrollo de Big Data de plantas del Sistema Coca-Cola en su totalidad.

Esta planta cuenta con tres líneas de producción, con capacidad útil total de 662.000.000 de litros de bebidas al año. Las líneas de producción son: una de bebidas carbonatadas REFPET (plástico retornable), una  de bebidas carbonatadas PET (plástico desechable) y una línea de agua mineral.

La producción anual estimada para 2019 es de 308.000.000 millones de litros. Coca-Cola Andina genera actualmente más de 7.700 empleos directos en sus operaciones en Brasil, siendo más de 5.300 en Río de Janeiro, entre los cuales 441 son en la nueva planta de Duque de Caxias.

"Esta nueva planta que nos permite embotellar agua mineral a un costo muy competitivo, asegurando el abastecimiento y evitando el flete de transferencia que teníamos hasta ahora desde Riberao Preto. Además, logramos duplicar la capacidad de producción en envases retornables, un formato que nos permite alcanzar puntos de precio más atractivos y atender a un mayor número de consumidores", explicó Miguel Ángel Peirano, vicepresidente ejecutivo Coca-Cola Andina.

En tanto, el CEO de Coca-Cola, James Quincey, destacó que la estrategia de la compañía "está centrada en nuestros clientes y consumidores, y esta planta más que duplica la capacidad de retornables de Coca-Cola Andina en Brasil. Esto permitirá a nuestro sistema ofrecer a los consumidores empaques convenientes y ecológicamente amigables, lo que es clave para nuestros planes de aportar a un mundo sin residuos y robustecer la sustentabilidad de nuestro negocio".

 

Sustentabilidad. Duque de Caxias tiene importantes elementos relacionados con la sustentabilidad. “Desde la adquisición del terreno donde construimos la planta nuestra preocupación por la sustentabilidad ha estado presente. Nuestra primera iniciativa consistió en un extenso proceso de recuperación ambiental de la propiedad”, explicó Peirano.

Este proceso de recuperación ambiental fue fundamental para la protección de los manantiales de aguas superficiales y subterráneas existentes en el terreno y en el entorno, entre ellos el Río Taquara, cuya recuperación de su vegetación ciliar también se ha promovido con especies nativas de la Mata Atlántica, con la reforestación de más de 20.500 m².

Además, se creó un área de preservación ambiental de 31,2 hectáreas dentro de la propiedad, y se está implementando un programa de monitoreo por drones de la vegetación del entorno, entre otras medidas.

Autores

AméricaEconomía.com