Incorporar una nueva refinería a la operación de la empresa petrolera implicará un replanteamiento de las perspectivas crediticias de la firma, advierte la calificadora.
Washington. La calificadora Moody’s advierte que antes de pronunciarse sobre la nota soberana o la de Pemex esperarán para entender el nuevo modelo de negocios de la petrolera, el reforzado vínculo financiero que tiene con el gobierno federal y cómo embonan ambos planteamientos con el compromiso de responsabilidad fiscal.
“Por ahora no están presentes los factores para poder evaluar de manera completa o integral a Pemex en el mediano plazo. Lo único que está claro hasta el momento es que el modelo de negocios es diferente de lo que era antes. Tomaremos la información y en el transcurso del año haremos los replanteamientos que sean necesarios en términos de en qué medida tiene que cambiar o no nuestra percepción de riesgo crediticio para Pemex y para el gobierno”, aseveró Mauro Leos, director asociado para América Latina en la calificadora.
Previo a su encuentro con los funcionarios de la Secretaría de Hacienda, durante su estancia en Washington para asistir a las Reuniones de Primavera del Fondo Monetario Internacional, comentó que el hecho de que Pemex cubra sus necesidades de inversión para este año, si bien es necesario, no es suficiente para determinar cómo se verá afectado el perfil crediticio de mediano plazo (de la empresa), a partir de cómo se está haciendo del modelo de negocios.
Entrevistado por El Economista, explicó que al integrar una nueva refinería al modelo de negocios de Pemex, la calificadora hará un replanteamiento sobre las nuevas perspectivas crediticias de la empresa.
Financiamiento 2021. El analista identifica una participación más activa del Estado en la petrolera. Reconoce que el gobierno tiene el objetivo, por lo pronto, de estabilizar la producción y a partir de ahí, incrementarla. Y en el corto plazo, no acudir a los mercados financieros en el 2019.
Pero la gran duda, de inversionistas y mercado, lo que tiene mucho mayor relevancia en términos crediticios para la perspectiva de mediano plazo es cómo se resolverá el tema de financiamiento para Pemex hacia delante, para el 2020 y el 2021. Esto, ante el cambio importante y significativo en el modelo de negocios.
Moody’s fue la primera calificadora que en el 2016 colocó la nota de Pemex al borde de las notas especulativas. Eso significa que, al sufrir un recorte de calificación, perdería el grado de inversión que le facilita acceso a recursos con un costo más competitivo y condiciones más favorables.
Confirman plan de negocios. Pemex está desarrollando un plan de negocios que aparentemente presentará al mismo tiempo que el Plan Nacional de Desarrollo. ¿Sería un determinante para la próxima acción de calificación de Moody’s sobre Pemex?
Dependerá de cómo se manda el mensaje, porque en más de una ocasión el mensaje del equipo económico ha sido replanteado por el presidente. Están algunas declaraciones que hizo el subsecretario Arturo Herrera en Europa, detalles como la expansión de la economía este año. Y, ahí, la duda de todos, no sólo del mercado, es cuál es el mensaje y qué parte del mensaje será refrendado y refleja los puntos de vista del gobierno en general y en particular del presidente.
La intención del gobierno de utilizar los recursos del Fondo de Estabilización de los Ingresos Presupuestarios para inyectar a Pemex una parte ¿debilitará la fortaleza de las finanzas públicas?
Es claro que el fondo continuará existiendo, con menos recursos. Que se va a reestructurar y que la transferencia de parte de estos ahorros tiene que ver con cubrir las necesidades de financiamiento que tiene Pemex para este año, y asegurar que, como se planteó al principio, la empresa no tenga que acudir a los mercados financieros. Pero la viabilidad financiera tiene que ver con el modelo de negocios y el planteamiento estratégico, lo que va mucho más allá de este año.
Moody’s mantiene a México con una calificación cuatro escalones arriba del grado de inversión, que corresponde a “A3”, indicando a los inversionistas que el país cuenta con “solvencia notable”. La nota de Pemex en Moody’s es “Baa3” desde el 2015, equivalente al “BBB-”, que es grado de inversión sostenido por el apoyo soberano.
Si tuviera que salir solo al mercado a buscar recursos, el nivel de costo financiero de la petrolera sería muy cercano al de los emisores con calificación en grado especulativo.
Nuevo esquema de negocio de Pemex debe hacerse sin prisas: FMI. Washington, D.C. México tiene la solidez financiera para que las autoridades diseñen sin prisas el plan integral de negocios que fortalecerá a Pemex.
Es preferible que se tomen un par de meses más, que realicen un mejor análisis sobre la situación del mercado petrolero, en vez de hacer un plan rápido que responda a la urgencia del mercado, recomendó Alejandro Werner, director del Departamento del Hemisferio Occidental del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Entrevistado por El Economista, reconoció el sentido de urgencia que tienen los inversionistas que han cuestionado la capacidad de Pemex para renovar su deuda en el mercado. Pero sostuvo que lo más importante es que el programa de negocios se diseñe lo mejor posible y no solamente para dar una señal en un momento determinado.
Conocer la estrategia comercial, de negocios y empresarial de la petrolera para los próximos años, así como los niveles de eficiencia y productividad, ayudará a la sociedad financiera en conjunto para tener una visión más completa sobre Pemex, precisó.
Pero lo más importante para México es que se logren acuerdos y se tomen el tiempo necesario para realizar los análisis que les permita encontrar la mejor solución para la empresa, manifestó.
Werner consideró que el anuncio que ha emitido el gobierno para fortalecer a Pemex en el corto plazo es importante. Por eso la relevancia de diseñar la estrategia de negocios que se requiere, sin prisas.
Un día antes de la entrevista, el viernes 12 de abril, el economista regional del hemisferio occidental en FMI, Krishna Srinivasan, comentó en conferencia de prensa que para generar credibilidad y certidumbre sobre la situación financiera de Petróleos Mexicanos se requiere mucho más que una nueva inyección de capital por parte del gobierno federal. Tienen que presentar un plan de negocios de largo plazo, que incluya también la participación de la Iniciativa Privada.
La estrategia del gobierno mexicano de otorgar recursos a la petrolera de los fondos de estabilización es una medida de corto plazo que no atiende el problema de origen. “Sólo estarán ganando tiempo”, aseveró en la conferencia de prensa donde presentaron el panorama económico para el hemisferio occidental, donde se encuentra México.