López Obrador sostuvo que la nueva instalación, que estará ubicada en el puerto de Dos Bocas de Tabasco, se empezará a construir el 2 de junio y estará lista para mayo de 2022. La obra está estimada en US$8.000 millones.
Ciudad de México. La estatal petrolera mexicana Pemex se encargará del proyecto de construcción de una refinería en el sureste del país, dijo este jueves el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, luego de que se declarara desierta la licitación de la obra.
El mandatario aseguró que ninguno de los postores cumplió con las bases de la licitación, en gran medida, porque sobrepasaron el monto y el tiempo de construcción estipulado por su administración para la obra.
López Obrador, conocido por su acrónimo AMLO, sostuvo que la nueva instalación, que estará ubicada en el puerto de Dos Bocas, en el estado suroriental de Tabasco, se empezará a construir el 2 de junio y estará lista para mayo de 2022.
Además, aseguró que el Gobierno ya tiene disponible una tercera parte del presupuesto para la refinería que, dijo, no deberá sobrepasar los 160,000 millones de pesos (unos US$8.000 millones).
"La licitación se declara desierta", dijo AMLO en su habitual rueda de prensa matutina.
"Unas (empresas ofrecieron) 10 (mil millones de dólares) otras 12 (mil millones de dólares). Pero se pasan de los 8 (mil millones de dólares) y también en el tiempo: sólo una (empresa) se comprometía a tener la refinería en el 2023", justificó.
Las firmas invitadas a la licitación fueron la estadounidense Bechtel, que compitió en consorcio con la italiana Techint; la australiana WorleyParsons en consorcio con la estadounidense Jacobs; así como la francesa Technip y la estadounidense KBR.
Dos Bocas, una promesa de campaña de AMLO, será la séptima refinería de Pemex y forma parte de un plan gubernamental para reducir las crecientes importaciones de gasolinas. Sin embargo, expertos aseguran que la endeudada petrolera debería enfocarse más en exploración y producción que en refinación.
El proyecto podría aumentar la carga financiera de Pemex, la compañía petrolera más endeudada del mundo y que se encuentra al borde de perder su grado de inversión.
Pemex y la Secretaría de Energía serán los encargados de llevar la coordinación del proyecto, realizar la procura anticipada de los equipos, supervisar y desarrollar la ingeniería, procura temprana y construcción de la obra.
"Vamos a que nos cueste 160.000 millones de pesos (unos US$8.000 millones), en tres años, no más. Para que salga en tiempo y con este presupuesto necesitamos hacerla nosotros de manera directa, con el apoyo de los técnicos y los trabajadores mexicanos", dijo AMLO.