Una vez en funcionamiento, podrá realizar operaciones simultáneas y contará con un nivel de eficiencia equiparable a los mejores aeropuertos del mundo.
Ciudad de México.- La Secretaría mexicana de la Defensa Nacional (Sedena) ya cuenta con los estudios técnicos, la ingeniería, los recursos económicos y un avance en los proyectos ejecutivos con los que comenzó la construcción del aeropuerto de Santa Lucía, aseguró el general Gustavo Vallejo, ingeniero a cargo. “El Aeropuerto Internacional General Felipe Ángeles es un proyecto viable técnica, legal, social y financieramente”, reiteró.
Incluso aceptó la petición del mandatario de acelerar los trabajos para inaugurarlo el 21 de marzo del 2022, a pesar de que el plan requiere de 30 meses.
De acuerdo con el general Vallejo, el diseño y planeación del aeropuerto se realiza en apego a las normas recomendadas por la Organización de Aviación Civil Internacional y leyes aeronáuticas, así como a las mejores prácticas aeroportuarias a nivel mundial. Además, con el apoyo de la Agencia Federal de Aviación Civil se garantizará que toda infraestructura del aeropuerto se encuentre validada y certificada, conforme a la normatividad nacional.
Error de cálculo. La obra —que se construirá en la base aérea militar del mismo nombre, en el Estado de México— ha sufrido hasta la fecha tres ajustes en su presupuesto proyectado.
De una inversión inicial de 70,342 millones de pesos —el costo prometido por el presidente Andrés Manuel López Obrador— se pasó a una de 78,557 millones, al incluirse la compra de terrenos para amortiguamiento acústico y la reubicación de las instalaciones militares dentro del polígono, no contemplada inicialmente.
Este ajuste se conoció en abril, en la Manifestación de Impacto Ambiental presentada por la Sedena. Ahí se advirtió también de una modificación en la configuración de pistas, debido al cerro de Paula, que no fue advertido en el proyecto conceptual del AISL, elaborado por José María Riobóo, quien fungió como consejero del presidente en la promoción del proyecto.
A finales de julio, en el Informe de Finanzas Públicas de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) correspondiente al segundo trimestre del año, apareció una cifra actualizada a 91,977.8 millones de pesos.
Este monto no incluye el costo de los estudios de preinversión (885.6 millones de pesos) ni el del equipamiento técnico de los Servicios a la Navegación en el Espacio Aéreo Mexicano (1,877.9 millones de pesos). Finalmente, el 8 de septiembre, en el Proyecto de Presupuesto de Egresos que presentó la SHCP a la Cámara de Diputados, la Sedena comunicó que el costo de la infraestructura sería de 95,260.4 millones de pesos, lo que suma un aumento de 35.4% respecto del costo previsto originalmente.
La modificación del proyecto va de la mano con un nuevo diseño, que estaría a cargo de Francisco González Pulido, quien fue invitado por la Secretaría. En la documentación presentada por la dependencia para obtener la autorización ambiental para el proyecto, ya se aprecia un diseño arquitectónico de la terminal aérea de Santa Lucía distinto respecto del observado en el proyecto conceptual de José María Riobóo.