El presidente y CEO del Grupo México, Óscar Gonzales Rocha, dijo que la posibilidad de una demanda no está prevista y reiteró el plan de inversión de la minera para Perú en 2020, que asciende a unos US$8.000 millones.
Lima. La compañía Southern Peru Copper Corporation no tiene pensado entablar ninguna demanda internacional contra el Estado peruano por el retraso en el proyecto minero Tía María, reveló su presidente y CEO del Grupo México, Óscar Gonzales Rocha.
“Eso no lo tenemos pensado. Pero si hubiera alguna otra acción que ameritara la presentación de una demanda, lo analizaríamos. Pero ahora no tenemos esa intención”, subrayó.
En declaraciones a Red de Comunicación Regional (RCR), Gonzales Rocha confirmó también que Southern Perú sigue trabajando en el valle de Tambo para la realización del proyecto Tía María, toda vez que “ya está autorizada su construcción”.
“Al gobierno le interesa que haya inversión para que puede tener mayores ingresos y pueda desarrollar el país. Y el proyecto va a tener, además de más inversión para el Estado, mucho mayores empleos para la población de Arequipa”, aseveró.
Proyectos en macha. El directivo de Southern Perú aseguró que no se ha afectado el avance de los demás proyectos que Southern Perú desarrolla en el país, como Cuajone (Moquegua), Los Chankas (Apurímac) o Michiquillay (Cajamarca).
"Nosotros seguimos invirtiendo porque es beneficioso para la empresa tener más producción, como lo ha tenido del año 2018 al 2019. Y esperamos que en el 2020 también lo tenga", dijo.
En tal sentido, aseguró que las inversiones no se van a ver afectadas. "Ojalá pudieran ser, dentro de lo que hemos calculado, alrededor de los US$8.000 millones, que incluían a Tía María, Los Chankas, Michiquillay y la modernización o una nueva fundición que se le ofreció al presidente, en su visita a México”, anotó.
Responsabilidad social. El titular de Southern Perú destacó igualmente que son palpables los resultados, los cambios positivos y la mejoría que las localidades del sur Perú han tenido con las inversiones de su representada, así como la aplicación de su política de responsabilidad social en las zonas de influencia de los emprendimientos mineros a su cargo.
“La empresa tiene más de sesenta años trabajando en el Perú, en las regiones de Tacna y Moquegua. En el caso de Tacna, con Toquepala y luego en Moquegua, con la mina de Cuajone y la fundición y refinería del puerto de Ilo, se han visto los resultados y los cambios“, detalló.