Los latinoamericanos sufren la creciente degradación del aire que respiran. El tráfico y la destrucción de los bosques afectan la futura viabilidad de centros urbanos. Y la contaminación ambiental acorta la vida.
Una lluvia con granizo le llevó alivio este 16 de mayo a los más de 22 millones de habitantes de Ciudad de México, tras varios días de emergencia ambiental, provocada por el tránsito de 5,6 millones de autos, los gases de la industria e incendios forestales.
La Secretaría de Educación Pública anunció la suspensión de clases, medida a la que se sumaron la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y el Instituto Politécnico Nacional (IPN). También las actividades al aire libre han sido restringidas. Ciudad de México sufre del mismo mal que otras urbes latinoamericanas, que incluso le llevan la delantera en contaminación, como Lima y Santiago de Chile.
Chile, campeón de la quema de leña. A pesar de las noticias sobre el smog en Ciudad de México, Lima o Bogotá, Chile es el caso más preocupante de toda América Latina. Chile, el país sede de la próxima Cumbre Mundial del Clima COP 25, ocupa el puesto 26 de los países con peor calidad de aire de un total de 73. Peor aún, Santiago de Chile es la ciudad capital más contaminada de América Latina.
Es más, el reporte Greenpeace/AirVisual 2018 revela que de las diez ciudades latinoamericanas más contaminadas con micropartículas, nueve son chilenas. Dicho informe mundial, conocido como PM2.5 porque toma en cuenta las partículas más finas, establece además que de las diez urbes más contaminadas del planeta, siete se ubican en la India.
"Santiago de Chile ocupa el lugar 20 dentro de las 62 capitales más contaminadas del mundo, donde prácticamente todo el año sus niveles se ubican de moderado a muy malo”, dice Estefanía González, coordinadora de campañas de Greenpeace, quien explica que "el uso de la leña es una de las mayores fuentes de contaminación en Chile”.
Perú: en Lima se come bien, pero se respira mal. El grado de contaminación en Lima le vale el puesto 22 entre las capitales del mundo. La capital de los peruanos es culpable de que el país ocupe incluso el puesto 21 entre los más contaminados, antecedido por Kazajistán y seguido por Etiopia.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en Lima mueren, cada año, más de 15 mil personas debido a enfermedades respiratorias y cardiacas ocasionadas por la contaminación ambiental.
México y siete ciudades problema. México, antecedido por Macao y seguido por la República Checa, sustenta el puesto 33 entre los más contaminados. Mientras en el mismo ranking mundial de contaminación de las capitales del planeta, Ciudad de México ocupa el puesto 30, y con esto, el tercer lugar en América Latina, seguido de Brasil.
Pero en el mismo México se destaca Mexicali, en el noroeste del país, en donde durante tres meses al año aumenta la polución a estándares no saludables.
Del top 10 de las ciudades más contaminadas en Norteamérica, 7 son mexicanas. La posición número dos en Norteamérica la tiene Anderson, en California, mientras Ciudad de México ocupa el número 15. Antes están Toluca, Ecatepec de Morelos, Tlalnepantal de Baz y Nezahualcóyotl, todas ciudades mexicanas no muy presentes a nivel internacional.
Colombia y su capital, un ejemplo de ineptitud. Gracias al aire de Sao Paulo, Brasil ocupa el cuarto puesto de los países más contamidos en América Latina, seguido por Colombia, en el quinto lugar. A su vez, Colombia ocupa el puesto 50 entre los países con mayor contaminación a nivel mundial y su capital el 44. Bogotá, una ciudad de unos 10 millones de habitantes, incluyendo a la población de municipios vecinos, está a punto del colapso total del tráfico: la falta de metro, muchos vehículos a diésel, empezando por Transmilenio, un parque automotor anticuado, y la masiva tala de bosques de "Los Cerros”, su principal fuente de oxígeno, están llevando a esta capital, a los 2.616 metros de altura, a tener uno de los aires más nocivos de la región.
Néstor Rojas, profesor de la Universidad Nacional, advierte en El Tiempo, que "los controles son completamente ineficaces", porque hay vehículos que con más de 50 años de trabajo siguen causando una gran contaminación.
Durante las últimas alertas ambientales, en febrero de 2019, las autoridades tuvieron que repartir tapabocas a la población más vulnerable. Además de la fuerte llegada del fenómeno del Niño, con sequía y altas temperaturas, en febrero los vientos llevaron a la ciudad el humo de los incendios forestales provocados en las cercanías y en Venezuela, en donde la quema de bosques se ha vuelto una práctica nociva hasta para los habitantes de la capital de Colombia.
Más polución, menos vida. La contaminación del aire representa un importante riesgo para la salud. El reporte de Greenpeace/AirVisual concluye que la contaminación del aire, tanto en espacios abiertos como cerrados, es responsable de unos siete millones de muertes en el mundo, cada año.