Las primarias son respaldadas por el oficialismo, pero rechazadas por la oposición, que las considera un gasto inútil y un intento del oficialismo de avalar la candidatura de Evo Morales, la cual consideran ilegal.
La Paz.- Está previsto que las 7.387 mesas permanezcan abiertas desde las 08:00 a las 16:00 hora local, en 3.551 sedes electorales a las que están convocados 1.715.880 militantes de los nueve partidos y alianzas políticas que concurren a las primarias, según datos del Tribunal Supremo Electoral de Bolivia.
"Es el ejercicio de la democracia, de un derecho político de los militantes", declaró a los medios la presidenta del órgano electoral, María Eugenia Choque.
La presidenta recordó que las primarias son "inéditas en el país" y por "primera vez" se dispone de un registro de militantes "de todas las organizaciones políticas".
El registro fue criticado por la oposición al contener inicialmente numerosos errores, hasta el punto de que políticos opositores figuraban en el gubernamental Movimiento al Socialismo (MAS), por lo que fue sometido a un proceso de revisión.
Los resultados preliminares se esperan a partir de las 20:30 hora local del lunes y los definitivos la semana entrante.
Respaldadas por el oficialismo, rechazadas por la oposición. El presidente de Bolivia, Evo Morales, candidato a la reelección por el MAS, llamó este pasado sábado participar en lo que calificó como un día "histórico".
Sin embargo, varios de los principales candidatos opositores anunciaron que no votarán y solo lo harán el mínimo de militantes de sus partidos necesario para avalar sus candidaturas.
El oficialismo defiende las primarias como un ejercicio de democracia interna de los partidos. Sin embargo, la oposición denuncia que son un gasto inútil, de unos 4,7 millones de dólares, porque los militantes solo pueden votar una candidatura de su partido, sin alternativas.
La oposición también critica que las primarias son un intento del oficialismo de avalar una candidatura de Morales que consideran ilegal.
El órgano electoral habilitó la candidatura del presidente para un cuarto mandato en base a un fallo del Tribunal Constitucional del país, que estableció el derecho a la reelección indefinida.
Sin embargo, la oposición y movimientos sociales críticos argumentan que debió prevalecer la Constitución del país, que limita a dos los mandatos consecutivos, como también un referéndum que negó a Morales la posibilidad de eliminar ese límite.
Las elecciones generales se celebrarán en octubre.