La sanción implica el bloqueo de todos los bienes y activos que la DGCIM tenga directa o indirectamente bajo jurisdicción de Estados Unidos, así como la prohibición de toda transacción legal que involucre a individuos y entidades estadounidenses.
Washington. Estados Unidos sancionó este jueves a la Dirección General de Contrainteligencia Militar (DGCIM) de Venezuela tras la muerte por presunta tortura del militar Rafael Acosta Arévalo, detenido en ese centro acusado de conspirar contra el presidente Nicolás Maduro.
"El arresto por motivos políticos y la muerte trágica del capitán Rafael Acosta fue injustificado e inaceptable", dijo el secretario del Departamento del Tesoro estadounidense Steven Mnuchin al anunciar la medida.
La sanción implica el bloqueo de todos los bienes y activos que la DGCIM tenga directa o indirectamente bajo jurisdicción de Estados Unidos, así como la prohibición de toda transacción legal que involucre a individuos y entidades estadounidenses.
El Departamento del Tesoro está comprometido a "poner fin al trato inhumano" del gobierno de Maduro hacia sus opositores, subrayó Mnunchin, citado en un comunicado.
En silla de ruedas, incapaz de hablar y con señales de tortura
Acosta murió el 29 de junio bajo custodia de la DGCIM. El capitán de corbeta de la Marina venezolana había sido arrestado el 21 de junio vinculado a un supuesto plan para matar a Maduro.
Dado por desaparecido durante una semana, fue presentado el 28 de junio ante un tribunal militar en silla de ruedas, incapaz de hablar y con señales de tortura. El juez ordenó su traslado a un hospital militar, donde horas después falleció.
Comunidad internacional urge a actuar ante muerte de Acosta. La muerte de Acosta "es solo la muestra más reciente de brutalidad llevada a cabo por una agencia notoria por sus métodos violentos", dijo el Departamento del Tesoro, y señaló que el uso de la tortura por parte de la DGCIM ya fue detallado por la Oficina de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, así como por la Organización de los Estados Americanos y la ONG Human Rights Watch.
La muerte de Acosta Arévalo ha provocado una fuerte reacción de la comunidad internacional: los países del Grupo de Lima consideraron que el militar había sido "asesinado", mientras que la Unión Europea (UE) reclamó una investigación "completa e independiente" del caso.
Asimismo, este lunes, veinticinco exjefes de Estado y de Gobierno latinoamericanos "urgieron" a la comunidad internacional a actuar tras la "tortura" y muerte de Acosta Arévalo.
Estados Unidos, que encabeza la presión internacional para sacar del poder a Maduro, cuyo gobierno considera ilegítimo, ha sancionado a decenas de funcionarios, exfuncionarios y entidades de Venezuela por corrupción, narcotráfico y abusos de los derechos humanos.