El Ministerio Público ha convocado a los presidentes de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE), Jaime Vargas; del Movimiento Indígena de Cotopaxi, Leonidas Iza; y el del Frente Unitario de Trabajadores (FUT), Mesías Tatamuez, para que declaren el 23 y 26 de diciembre y el 6 de enero.
La Fiscalía de Ecuador ha citado este lunes a líderes del movimiento indígena del país por la retención de policías y periodistas, en el marco de las múltiples investigaciones abiertas por la violencia desatada en las protestas del pasado mes de octubre contra el Gobierno de Lenín Moreno.
El Ministerio Público ha convocado a los presidentes de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE), Jaime Vargas; del Movimiento Indígena de Cotopaxi, Leonidas Iza; y el del Frente Unitario de Trabajadores (FUT), Mesías Tatamuez, para que declaren el 23 y 26 de diciembre y el 6 de enero.
También han sido citados como testigos los cabos Edison Enríquez y Carlos Haro y el sargento Emilio González, tres de los uniformados retenidos, según informa el diario ecuatoriano 'El Universo'.
Las autoridades judiciales tratan de determinar si son culpables de un delito de secuestro por retener a policías y periodistas durante varias horas en la Casa de la Cultura de Quito, que en esos días fue usada por la CONAIE como su cuartel general en la capital ecuatoriana.
Los sucesos de octubre están siendo investigados en seis frentes que van desde el judicial al parlamentario, incluyendo instancias internacionales como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Las protestas en Ecuador estallaron a finales de septiembre por la decisión del Gobierno de retirar los subsidios al combustible como parte del "paquetazo" de ajustes económicos exigidos por el Fondo Monetario Internacional (FMI) a cambio de una inyección de US$4.200 millones.
Las manifestaciones, inicialmente protagonizadas por transportistas y sindicatos, acabaron lideradas por la CONAIE, que tomó Quito hasta el punto de obligar al Gobierno a cambiar su sede a Guayaquil durante unos días.
Al menos diez personas murieron durante la ola de protestas contra Moreno, que finalmente tuvo que recuperar los subsidios al diésel y la gasolina y accedió a negociar el ajuste económico con la CONAIE y otros colectivos.
