Más personas podrían haber logrado salvarse, pues el ecuatoriano que en un principio se creyó que era el único que logró salir con vida de la masacre, dijo que los sobrevivientes fueron cuatro.
Tegucigalpa. En medio de la oscuridad de la noche logró zafarse el cable con el que habían atado sus manos.
Aprovechando las tinieblas alcanzó a esconderse justo antes de que el resto de sus compañeros de viaje fueran asesinados por el grupo terrorista Los Zetas.
Al amanecer, desde su escondite se escuchaban algunos lamentos y, desafiando a la muerte, salió a constatar lo que había ocurrido aquella terrible noche.
Las personas con las que pretendía llegar a Estados Unidos habían sido acribilladas, a excepción de él y otro joven que se encontraba con vida.
Aquellos lamentos eran de Luis Fredy Lala, el joven ecuatoriano que también sobrevivió a la matanza de los 72 migrantes en un rancho del estado de Tamaulipas, México.
Aunque parezca increíble, Lala fue auxiliado por un valiente joven hondureño que también logró sobrevivir en la masacre y que hasta hace poco se mantenía en completo secreto por su seguridad y la de sus familiares en el país.
Sin embargo, fue el presidente de Ecuador, Rafael Correa, quien rompió el secreto tras haber escuchado el testimonio de Lala.
Relato. Los detalles de cómo el hondureño sobreviviente logró escapar del grupo terrorista Los Zetas fueron revelados este jueves por el propio vicecanciller de la República, Alden Rivera, quien aseguró haber entablado una conversión con el hondureño en el territorio mexicano.
Rivera, quien hasta el martes encabezó el proceso de repatriación de los hondureños fallecidos en la matanza, aseguró que "el hondureño que sobrevivió a la masacre es un muchacho muy joven, un buen muchacho y valiente".
El vicecanciller indicó que el joven sobreviviente auxilió al ecuatoriano, quien también salió con vida de la masacre, y expresó que no se revelaba su nombre por garantías de seguridad y eso ahora se extiende a sus padres y sus familias, pues se teme que los socios de Los Zetas en Honduras procedan contra estas personas.
Según el funcionario, una vez que el sobreviviente hondureño liberó a Lala, ambos escaparon, pero al escuchar varios disparos de bala en el camino decidieron separarse.
Luego de varias horas de camino, Lala se encontró con una patrulla de carretera y dio el llamado de alerta sobre los 72 migrantes brutalmente masacrados. Rivera contó que el hondureño siguió su camino hasta que llegó a un centro de migrantes, donde también informó lo sucedido. El joven está en buen estado de salud, aseguró. El vicecanciller manifestó que el sobreviviente ya tuvo comunicación con su familia, específicamente con su madre, en Honduras. "Tanto él como la familia tendrán un esquema especial de seguridad", indicó.
Según Rivera, el hondureño sobreviviente indicó que había alrededor de 30 hondureños en el grupo de los 72 migrantes que fueron asesinados en México.
El representante de la secretaría de Relaciones Exteriores advirtió que estafadores en el país están llamando a familias de inmigrantes para engañarlos amenazando con que tienen detenido a algún familiar.
"Esto debe ser denunciado a las autoridades para actuar contra estos delincuentes nacionales", advirtió
Rivera dio a conocer que grupos del crimen organizado ven en la migración una fuente de ingresos para financiar su guerra interna entre carteles y también están reclutando gente para esa lucha. "Alertamos a los hondureños porque hay gente que se está dedicando a llamar a familias para pedirles rescate y les indican que sus parientes están secuestrados, esto lo deben denunciar a las autoridades y así capturar a estos estafadores".
Cuatro sobrevivientes. El ecuatoriano Luis Freddy Lala Pomavilla aseguró que cuatro personas, incluidos él y un hondureño, sobrevivieron a la matanza de 72 emigrantes latinoamericanos la semana pasada en México, según un testimonio difundido por el gobierno de Ecuador este jueves.
"Cuatro personas quedamos salvadas y de ahí, el resto, todos murieron", dijo el ecuatoriano, quien señaló que el grupo secuestrado por la banda narcotraficante de Los Zetas, la noche del 21 de agosto, incluía a 76 emigrantes.
El ecuatoriano relató que el hondureño se salvó de ser ejecutado al esconderse entre los matorrales de la casa.
"Se escondió, no avanzaron a verle para matarlo, estaba la casa llena de hierba y él se metió ahí, por eso se salvó", dijo el joven, que no ofreció detalles sobre la nacionalidad ni la suerte de los otros sobrevivientes.