El presidente ecuatoriano justifica su decisión sobre el fundador de Wikileaks "por la permanente intromisión política en asuntos internos de otros países".
Quito.- El presidente de Ecuador, Lenín Moreno, ha insistido en que el fundador de WikiLeaks, Julian Assange, "violó reiteradamente las convenciones de asilo" durante su estancia en la embajada de Ecuador en Londres, razón por la que le suprimió ese derecho.
En una entrevista con el diario ABC publicada este viernes, Moreno, de visita en Washington, ha justificado la decisión "por la permanente intromisión política en asuntos internos de otros países", como España, Francia o Estados Unidos, además de denunciar a Ecuador lo que, en su opinión, va en contra del principio de "asilo diplomático".
"No podíamos permitir que nuestro país se convirtiera en un centro de operación de grupos que buscan afectar la institucionalidad de otros países y afecta el derecho a la privacidad de los ciudadanos", ha declarado el mandatario ecuatoriano.
El pasado día 11 el Gobierno de Ecuador retiró la condición de asilo al fundador de Wikileaks, que estaba en la embajada de ese país en Londres desde 2012, e inmediatamente la policía británica procedió a su detención, ya que la Justicia de ese país lo requería por violación de las medidas cautelares cuando estaba en proceso de extradición a Suecia.
Assange, de 47 años, había entrado en la embajada de Ecuador para evitar su extradición a Suecia, que entonces solicitaba su entrega por presuntos delitos sexuales y fue protegido por el anterior mandatario ecuatoriano Rafael Correa.
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Entrega de Assange: Lenín Moreno en la mira
Moreno ha insistido en que tomaron la decisión de retirar el asilo "soberanamente", sin consultar a otros países como Estados Unidos, que reclama a Assange por incitar al robo electrónico de información clasificada, aunque sí solicitaron al Reino Unido "garantías" de que el detenido "no sería entregado en extradición a un país en el que pueda sufrir torturas o pena de muerte".
En la entrevista, el presidente del país andino confirma, además, que desde que tomaron esa decisión, "los ataques cibernéticos a los sistemas informáticos ecuatorianos se duplicaron".