La acción del gobernador de la región limítrofe de Puno, acompañado de las autoridades sanitarias de esta región surandina, a 1.540 kilómetros al sur de Lima, busca contrarrestar la expansión de esta enfermedad, que en este país ascendió a 852 casos.
Lima. Las fuerzas de seguridad peruanas reforzaron el control de la frontera con Bolivia para impedir el ingreso de extranjeros y evitar la expansión del nuevo coronavirus (COVID-19), dispuesto por el gobierno del presidente Martín Vizcarra.
El gobernador de la región limítrofe de Puno, Agustín Luque, supervisó el bloqueo del pase fronterizo en la localidad conocida como Yunguyo, acompañado de un contingente de militares.
La acción del gobernador, acompañado de las autoridades sanitarias de esta región surandina, a 1.540 kilómetros al sur de Lima, busca contrarrestar la expansión de esta enfermedad, que en este país ascendió a 852 casos.
Luque adoptó la medida de reforzar la zona fronteriza después que se difundió un caso de coronavirus en ciudad boliviana de Cochabamba, en un paciente italiano de visita en Bolivia.
Según las autoridades peruanas, también se han dispuesto jornadas de vigilancia con unidades de la Marina de Guerra peruana en el Lago Titicaca, una extensa zona lacustre de 8.562 kilómetros cuadrados que comparten ambos países.
Hasta la fecha, la región surandina de Puno es una de las pocas zonas que aún no registran casos de personas contagiadas con el nuevo coronavirus.
El Ministerio de Salud (Minsa) precisó que Perú registra 852 contagiados, de los cuales 107 están hospitalizados, 40 en unidades de cuidados intensivos (UCI), 37 con ventilación mecánica y 18 fallecidos.