"Yo creo que la inmensa mayoría de los chilenos queremos cambiar nuestra Constitución", apuntó el mandatario Sebastián Pilera, tras votar en una jornada histórica a la que han acudido los chilenos de forma masiva.
Santiago. El presidente de Chile, Sebastián Piñera, depositó su voto en el plebiscito que se celebra este domingo en el país y en el que los votantes tienen la oportunidad de anular la Constitución pinochetista que lleva 40 años vigente en el país.
"Yo creo que la inmensa mayoría de los chilenos queremos cambiar nuestra Constitución", apuntó Piñera tras votar en el colegio San Francisco de Los Dominicos, en la capital, Santiago.
El presidente también pidió a la población que comparezca en masa para expresar su opinión. "Espero que en esta elección voten más chilenos de los que votaron en la última municipal", ha agregado Piñera. En las municipales de 2016 la participación fue de 35,8%. En la primera vuelta de 2017, del 46,6%, y en la segunda vuelta, del 49%, apunta el diario 'La Tercera'.
El plebiscito se está desarrollando sin incidentes de envergadura hasta el momento. Solo ha sido detenida hasta ahora una persona, vocal de mesa en el colegio Escuela Patagonia de Punta Arenas, en el extremo sur del país, que ha pasado a disposición policial por comparecer a la mesa bajo intoxicación etílica.
La última encuesta publicada hace dos semanas por Data Influye daba la victoria al 'sí' con el 69% de los votos, frente al 18% que se decantaban por el rechazo.
Pero los chilenos no solo deben decidir si quieren tener una nueva Carta Magna, sino la vía para elaborarla. Así, deberán elegir entre una "Convención Mixta Constitucional", integrada en partes iguales por miembros elegidos popularmente y parlamentarios en ejercicio, o una "Convención Constitucional" conformada exclusivamente por miembros elegidos popularmente.
De acuerdo con el citado sondeo, el 61% se decantan por la opción de la Convención Constitucional, que estaría integrada por 155 ciudadanos con igual número de mujeres y hombres, mientras que el 21% se inclina por la primera opción, que estaría dotada de 86 ciudadanos y 86 diputados designados expresamente por el Congreso.