Varios medios se han hecho eco de una reunión mantenida el 13 de febrero entre funcionarios de los servicios de Inteligencia y congresistas.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha considerado un "fraude" las informaciones sobre un supuesto plan de Rusia para interferir en las elecciones de noviembre para contribuir a su reelección al frente de la Casa Blanca.
Varios medios se han hecho eco de una reunión mantenida el 13 de febrero entre funcionarios de los servicios de Inteligencia y congresistas. La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, ha señalado en Twitter que "son los votantes estadounidenses los que deben decidir las elecciones estadounidenses, no (el presidente de Rusia) Vladimir Putin".
Trump ha denunciado también a través de la red social lo que considera una "campaña de desinformación" obra de los congresistas demócratas. "Dicen que Rusia me prefiere a mí antes que a cualquiera de los candidatos de los demócratas que aún han sido incapaces, después de dos semanas, de contar sus votos en Iowa", ha ironizado, en alusión a los problemas en la primera cita de las primarias.
El portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, también ha salido al paso de acusaciones que "no tienen nada que ver con la verdad". "Son informaciones paranoicas y, a nuestro pesar, saldrán más a medida que se aproximen los comicios", ha dicho ante los medios, según la agencia de noticias Sputnik.
El fiscal especial Robert Mueller ya analizó la presunta injerencia de Rusia en las elecciones de 2016, lo que fue visto como una "caza de brujas" por Trump. El informe Mueller desligó al presidente de los supuestos intentos de Moscú por influir en las elecciones, pero apuntó hasta diez ocasiones en las que Trump pudo obstruir las investigaciones.