La morenista considera en su proyecto continuar con la recuperación del poder adquisitivo del salario mínimo para llevarlo al nivel “más alto de la historia”. Esto implicaría ajustes anuales superiores a 11% durante toda su administración.
El proyecto de gobierno de Claudia Sheinbaum contempla continuar con la política implementada en la actual administración para el fortalecimiento del salario mínimo. El objetivo es que en 2030 este referente haya recuperado todo el poder adquisitivo que comenzó a perder en 1976.
De acuerdo con el documento “100 pasos para la transformación”, que plasma el proyecto electoral completo de la hoy virtual presidenta electa, se propone continuar con incrementos anuales de doble dígito en este indicador, para concluir el siguiente sexenio con “el salario mínimo más alto en la historia de México”.
“Se propone como meta para 2030, que el salario mínimo alcance el máximo histórico de 1976, recuperando así todo el poder adquisitivo que se perdió durante el periodo neoliberal”, expresa en el documento la abanderada de la coalición conformada por Morena, PT y PVEM.
La meta planteada se divide en dos partes. En primer, lugar, se contempla que para el año 2026 el salario mínimo sea equivalente a por lo menos dos veces la línea de pobreza por ingresos urbana (LPIU), “para alcanzar nuevamente un salario mínimo que sea suficiente para las necesidades más básicas de una familia mexicana”.
En lo que va de este año, la LPIU registra un valor promedio de US$ 253,7 mensuales. De manera que, en valores nominales actuales, el referente general de las remuneraciones sería de al menos US$ 507,5 mensuales, o US$ 16,9 al día, en el año 2026.
En 2024, el salario mínimo es de US$ 13,9 al día (US$ 425,1 por mes). De esta manera, con esta primera fase del proyecto, el aumento acumulado sería de al menos 20% en los primeros años de gobierno.
La segunda parte es la meta para el cierre del sexenio. Para 2030, en el documento se plantea que este indicador sea “suficiente para que una familia tenga acceso a los productos básicos y una vivienda digna”, lo que implicaría llevarlo a por lo menos a 2,5 veces la LPIU, lo que en valores actuales equivaldría a US$ 634,4 mensuales, o US$ 21,1 diarios.
De esta manera, en términos nominales y con valores del acumulado de lo que va de 2024, el salario mínimo tendría un crecimiento de al menos 50% en el sexenio.
“Seguiremos aumentando el salario mínimo en acuerdo con el sector empresarial. Los vamos a convencer de que el salario mínimo deba llegar a 2,5 canastas diarias. Eso significa un aumento nominal los siguientes años de cerca del 11% anual”, expresó Claudia Sheinbaum al presentar los 100 puntos en el arranque de su campaña.
El proyecto contempla además el fortalecimiento de la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos (Conasami) para darle mayores facultades de supervisión y sanción a las empresas que paguen menos, lo que requerirá reformas a la Ley Federal del Trabajo (LFT), “para que se consolide como una institución preponderante”.
“Se propone que la Conasami también cuente con facultades para revisar la concentración que existe en los mercados laborales de las diferentes entidades, municipios e industrias del país, así como para perseguir y multar empresas que no cumplan con el pago del salario mínimo y proponer cambios en ciertas industrias para reducir el desequilibrio entre trabajadores y empresas”, se detalla en el documento.
En la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador se puso en marcha una política para la recuperación del poder adquisitivo del salario mínimo con aumentos de doble dígito en cada año del sexenio. Con ésta, el referente general en el país pasó de US$ 4,9 a US$ 13,9 diario entre 2018 y 2024, lo que implica un crecimiento en términos reales de 110% aproximadamente.
De acuerdo con un análisis realizado por México, ¿Cómo Vamos?, con estos ajustes el nivel del poder adquisitivo del salario mínimo en la actualidad es similar al que tenía en el año 1982.
Cabe destacar que de acuerdo con una reforma al artículo 90 de la LFT promulgada en octubre de 2021, los incrementos anuales del salario mínimo no pueden quedar nunca por debajo del aumento de la inflación.
Los 5 ejes de la propuesta laboral de Sheinbaum
Tal como en el presente sexenio, el programa electoral de Claudia Sheinbaum contempla una serie de prioridades en materia laboral. Éstos son los cinco aspectos principales de su propuesta:
Primero, el salario mínimo. Como se mencionó anteriormente, se busca llevar este referente a un nivel equivalente a al menos 2,5 la línea de pobreza por ingresos urbana que mide el Coneval.
Segundo, salarios de trabajadores de la educación, seguridad y salud. Tal como lo planteó el presidente Andrés Manuel López Obrador, el proyecto de Sheinbaum contempla los ajustes para que maestros, policías, enfermeras y doctores ganen como mínimo US$ 907,3 mensuales, que es el salario promedio que perciben las personas inscritas en el IMSS.
Tercero, el programa de aprendices. La virtual presidenta electa plantea mantener Jóvenes Construyendo el Futuro, el programa insignia de la STPS para capacitación laboral de personas de entre 18 y 29 años que no estudian ni trabajan, y mejorar la vinculación con las empresas una vez que se concluyan los 12 meses de entrenamiento.
Cuarto, los jornaleros agrícolas. El proyecto contempla avanzar en el acceso a la seguridad social para las personas que se dedican al trabajo del campo y la certificación de empleo decente para las empresas que los emplean.
Quinto y último, las plataformas digitales. Se considera además el proyecto para regularizar a las personas que trabajan como choferes y repartidores de aplicaciones, para reconocer la relación laboral y garantizar el acceso a la seguridad social.
Algunas de las reformas relacionadas con estas propuestas ya están avanzadas en el proceso legislativo, por lo que arranque la LXVI legislatura y el nuevo periodo ordinario de sesiones, varias de ellas podrían ser retomadas.