Un análisis de Thomson Reuters muestra que nuevos tratamientos para hepatitis y VIH liderarán los mercados farmacéuticos este año.

Reuters. Se les denomina blockbusters: medicamentos con el potencial para vender un volumen superior a los US$ 1.000 millones desde su lanzamiento y hasta 2020. En 2016, según un análisis de Thomson Reuters, siete nuevos fármacos tienen esa característica.

El reporte "Drugs to Watch" destaca a los tratamientos para la enfermedad hepática y el VIH y manifiesta que la industria tendría un año productivo, aunque no tanto como 2015, cuando llegaron un total de 11 blockbusters.

Los dos éxitos más grandes en este sentido vendrían de Intercept Pharmaceuticals y Gilead Sciences, respectivamente. El primero lanzará el ácido obeticólico, como nuevo tratamiento para la enfermedad hepática crónica y que espera ventas de US$ 2.600 millones en 2020. El segundo, en tanto, es responsable de las novedades de la emtricitabina y tenofovir alafenamide, para el tratamiento del VIH, con ventas esperadas de US$ 2 mil millones.

Los blockbusters esperados para este año incluyen un fármaco para la hepatitis C por parte de Merck y otro para la leucemia de AbbVie.

Dos drogas de Roche -atezolizumab para el cáncer y ocrelizumab para la esclerosis múltiple- no están en la lista porque no está claro si entrarán al comercio este año o el próximo. No obstante, se espera que sus ventas superen los US$ 3 mil millones a 2020.