Este jueves seré anfitriona del lanzamiento de la línea 2013 de Jaguar, Land Rover y Range Rover. La empresa Jaguar se fundó en 1922 para producir carros de copiloto para motocicletas. Con los años se adaptó a las necesidades del mercado y evolucionó para producir los automóviles que hoy son reconocidos como iconos de lujo a nivel mundial.
Otra marca icónica es Burberry, que inició sus operaciones en 1856 y este año reportó ventas récord por US$2,07 billones. El legado británico tiene un sentido de innovación a través del tiempo. Los inicios de muchas empresas fueron humildes y con el tiempo se convirtieron en marcas modernas y representativas del mercado. Esto no se logra sólo a partir del número de años que tiene una empresa. La vigencia va mucho más allá de eso. El mercado de lujo británico tiene la habilidad de reinventar marcas clásicas para continuar con gran éxito y aceptación internacional.
Pero no todo es moda y autos. Hace unas semanas se organizó en Cancún el Mercado Internacional de Viajes de Lujo. Muchas compañías británicas participaron en este evento. Lo anterior evidencia la importancia que las marcas tradicionales han puesto en el turismo de lujo. México es un mercado que está creciendo rápidamente en este sector. De acuerdo con los indicadores de Bain, 2009 fue el peor año para la industria del lujo y, aun así, en México algunas compañías aumentaron sus ganancias.
Hay un incremento importante de las ventas británicas en México, particularmente en el sector de artículos de lujo. Nuestras marcas destacan por su tradición, diseño y calidad. La marca de té Twinings y las vajillas Wedgwood, las cuales iniciaron sus actividades en 1706 y 1759 respectivamente, ya tienen buena aceptación en México.
El día de ayer regresé de Querétaro, donde se realizó por primera vez en el continente americano el Día de Polo Británico. El deporte ha conectado a nuestros países durante siglos y es conocido por todos que mineros de Cornwall trajeron el futbol a México en el siglo XIX. Por esas mismas fechas, esos mineros también inauguraron el Polo Club de Pachuca. La decisión de traer el Día de Polo Británico a México refleja la oportunidad y dinamismo que se percibe en este país.
Por otro lado, mucha gente conoce la historia, la belleza y las tradiciones legendarias de nuestras universidades, Oxford y Cambridge.
Ya les había contado que Oxford ha educado a más líderes que ninguna otra universidad y que Cambridge ha graduado a 65 ganadores del Premio Nobel. Hoy, a más de ocho siglos de su fundación, siguen siendo dos de los mejores lugares para estudiar en el mundo.
Pero, ¿qué es lo que hace que una marca o una institución superen la prueba del tiempo? Obviamente el constante rediseño, pero también el aprender a evolucionar y redefinirse con respecto a los nuevos tiempos. Por ejemplo, los autos de lujo del siglo XXI, como los que presentarán en México Jaguar y Land Rover, combinan tecnología de punta y belleza en el diseño, pero además logran que sus emisiones de gases invernadero sean reducidas, tomando en cuenta así las necesidades de la sociedad actual.
La Universidad de Cambridge es venerada por su tradición, pero sigue siendo una de nuestras mejores universidades por su fabuloso parque científico y por seguir desarrollando productos e investigaciones de punta. Lo anterior es un ejemplo que México ha seguido al diseñar sus propios esquemas de investigación, ayudado, en algunas instancias, del fondo para programas de mi embajada. Así entonces, podemos concluir que el éxito involucra la tradición, pero con un sentimiento de modernidad que aborde las necesidades contemporáneas.
*Esta columna fue publicada originalmente en Excelsior.com.mx.