¿Cuándo se compra un alimento en qué se preocupa? Probablemente en saber qué ingredientes contiene, su tabla nutricional y, actualmente, en las advertencias de octógonos o semáforos según el país donde se encuentre. Pero ¿dónde queda la preocupación por saber cómo o dónde se elaboró ese producto? 

Las autoridades sanitarias de Latinoamérica han orientado la creación de sus normas sanitarias con el foco puesto en registrar el producto, aunque en los países de la región ese registro sanitario es simplemente un acto administrativo con ciertos requerimientos técnicos. Sin embargo, si se pensara en un enfoque global, este debería estar orientado desde el inicio a la cadena de suministro.

Pero les tengo malas noticias: no existe una autoridad que pueda abarcar el control sanitario de toda esa cadena de producción y que se encuentre fortalecida; o quizás sí existe, pero hay más de una, una autoridad para cada competencia, lo que en definitiva es un paliativo, pero no la solución.

Muchos de los países de la región cuentan con una autoridad sanitaria en los ministerios de Salud (por ejemplo, en el caso de Perú), y en otros países en los ministerios de Agricultura. Varios de estos últimos están fortalecidos en su sistema de control, sin embargo, los ministerios de Salud continúan con un enfoque de control focalizado en el registro del alimento, para dar la autorización de comercialización del mismo a los fabricantes locales, y no en los requisitos básicos para poder autorizar la comercialización.

¿Por qué el enfoque global no se utiliza en los ministerios de Salud de la región? 

Desde inicio de los años 2000 ya se conversaba en reuniones de la FAO sobre cómo fortalecer los sistemas nacionales de control, pero han pasado casi 20 años y muchos Estados son reacios aun al cambio. Entonces, ¿qué sucede con los intereses del Estado, del sector privado, de los consumidores, entre otros?

No se controla un alimento otorgando un registro sanitario -que pasa una evaluación en muchos países de siete a 30 días- únicamente para evaluar documentos y encontrar errores a los mismos. El control sanitario es un control vivo, de toma de acciones inmediatas; es por eso que un aporte importante es la información, educación, comunicación y capacitación de todos los involucrados. Es una acción latente para recibir información y tomar decisiones para la salud.

No obtante, y a pesar de que muchos de los países de Latinoamérica son la despensa del mundo y los alimentos que representan a cada país van con una marca bandera de orgullo nacional, actualmente algunos alimentos latinos se encuentran dentro de lista rojas. Ante esa alarma, es de suma importancia que los sistemas de control de alimentos nacionales sean dirigidos por una sola autoridad, o si hay muchas, que estas se enfoquen en un sistema global y evaluativo, y no en sistemas de control meramente documentarios.

Esta educación, entre todos los involucrados, no puede quedarse únicamente con frases bonitas que llevan décadas, pero que no toman acción viva. Hay que ponerle un sentido de vigilancia a todo alimento que va "de la granja a la mesa".