Leyendo un artículo sobre el libro Outliers (Fuera de Serie), me intereso mucho este particular concepto: el Índice de Distancia al Poder.
Es un muy buen libro, con definiciones acertadas y ricas de contenido, donde explica por qué algunas personas son exitosas y otras, con el mismo nivel de preparación y esfuerzo, no lo son. Pero específicamente quiero hablar del capitulo 7, que tiene el titulo de “Teoría Étnica de los Accidentes Aéreos”. En este capitulo se habla de la relación piloto-copiloto y cómo incide en los accidentes el nivel de confianza y comunicación existente entre ellos.
La confianza y comunicación entre piloto y copiloto es fundamental, ya que de ésta dependen la mayoría de los accidentes, que son una serie de pequeñas fallas que culminan con lo peor. Aquí es donde entra en juego el concepto del Índice de Distancia al Poder (IDP), que es la actitud de comunicación que se mantiene con la jerarquía y cómo se respeta la autoridad en una cultura determinada (una de las dimensiones culturales a las que hace mención el antropólogo holandés Geert Hoftsede).
En los países donde el IDP es alto la comunicación es deficiente, hay demasiados problemas para expresarse claramente con la jerarquía superior. Ejemplo: un empleado no contradice a su jefe, por más que sepa que éste está equivocado. Generalmente se origina porque el jefe no permite ser cuestionado o no transmite la confianza y humildad suficiente para poder aceptar opiniones.
Si transferimos este ejemplo a una relación piloto-copiloto, las consecuencias son nefastas, ya que el copiloto no le estaría comunicando claramente al piloto cuál es la situación en vuelo y cuáles son los problemas que se van suscitando.
Si analizamos a países con IDP bajo, vemos que sus lideres son mas humildes e informales, lo que facilita la comunicación y relación entre jerarquías superiores e inferiores.
Ahora bien, pasemos a analizar como influiría el Índice de Distancia al Poder si lo pasamos al ámbito empresarial.
Más allá de la comunicación, una empresa con IDP alto tiene las siguientes características:
*Organigramas altos
*Amplia diferencias de salarios entre niveles jerárquicos
*Privilegios y signos de status en niveles jerárquicos altos
*Trabajo de equipo ineficaz (obviamente, por falta de comunicación)
*Toma de decisiones centralizada
Mientras que una empresa con IDP bajo tiene las siguientes características (inversas al anterior):
*Organigramas achatados
*Mínima diferencia de salarios entre niveles jerárquicos
*No hay privilegios
*Trabajo de equipo es fundamental para alcanzar las metas.
*Toma de decisiones descentralizada.
¿Es posible que una empresa con un IDP alto pueda convertirse en empresa 2.0? La comunicación informal y directa entre jerarquías y la humildad del líder son una condiciones esenciales para avanzar en el nuevo paradigma. Es fundamental el concepto de IDP bajo para la empresa 2.0.
¿Será que el punto de partida del pasaje de empresa 1.0 a empresa 2.0 es tener como objetivo la baja progresiva de su IDP?
El cambio es cultural, y como todo cambio cultural será lento, pero indispensable para que nuestras compañías estén preparadas para afrontar los tiempos que se vienen. Pero tengamos en cuenta que las transiciones son cada vez más cortas y hay una generación (la generación Y) que viene empujando fuertemente con su nueva cultura y su nueva forma de ver las relaciones y la comunicación.
Transformar las compañías para poder incorporar a las próximas generaciones de profesionales y trabajadores en entornos de confianza y colaboración mutua será uno de los cambios fundamentales que actuaran como característica diferencial a tiempo de elección de un lugar para trabajar.