El anuncio de Trump terminó con una tregua de cuatro meses en una guerra comercial que le ha costado a las dos mayores economías del mundo miles de millones de dólares y que ha desacelerado el crecimiento global.
Pekín. La escalada del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en la guerra comercial con China dejó este lunes en el limbo los planes de negociaciones de alto nivel de esta semana para terminar con la disputa.
Los mercados bursátiles del mundo bajaron con fuerza y los precios del petróleo tocaron un mínimo de un mes después de que Trump tuiteó el domingo que aumentaría los aranceles a bienes chinos valorados en US$200.000 millones a un 25% desde el 10% y que pronto apuntaría al resto de las importaciones con nuevas tarifas.
El anuncio terminó con una tregua de cuatro meses en una guerra comercial que le ha costado a las dos mayores economías del mundo miles de millones de dólares y que ha desacelerado el crecimiento global.
No estaba claro este lunes si el viceprimer ministro chino, Liu He, viajaría a Washington como estaba planeado para sostener unas conversaciones que están programadas que comiencen el miércoles. Una fuente familiarizada con las negociaciones afirmó que Pekín estaba reconsiderando la asistencia de Liu después del tuit de Trump.
"El ambiente de las negociaciones ha cambiado", dijo un funcionario chino con conocimiento de la situación.
La continuación de las conversaciones y su formato son asuntos que se están reevaluando ahora, dijo el funcionario a Reuters bajo condición de anonimato. "Todo eso depende de la actitud de Estados Unidos", añadió.
Una delegación aún está preparándose para ir a Estados Unidos para mantener conversaciones comerciales, dijo más temprano este lunes el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores chino, Geng Shuang, sin decir si Liu formaría parte de ella.
Un portavoz de la Oficina del Representante Comercial no respondió inmediatamente a una consulta sobre las conversaciones en Washington y la presencia de Liu.
Los comentarios de este domingo de Trump llegaron de sorpresa después de que el mandatario y miembros de su equipo habían dicho reiteradamente que ambos países habían logrado avances para un acuerdo.
El mandatario pareció defender su decisión en un tuit temprano el lunes, arremetiendo contra el déficit comercial de Estados Unidos con China. También aseguró que habló sobre comercio con el primer ministro japonés, Shinzo Abe, en una "muy buena conversación".
Con China perdemos US$500.000 millones. ¡Perdón, pero no vamos a seguir haciendo eso!".
El cambio de tono de Trump se produjo después que el representante de Comercio de Estados Unidos, Robert Lighthizer, le dijo que todavía quedaban significativas barreras para poder llegar a un acuerdo y que China se estaba retirando de algunos compromisos previos, afirmaron personas con conocimiento de las negociaciones.