Los comentarios ponen de relieve el deseo de China de proteger a sus agricultores en un momento en que se encuentra bajo presión para comprar miles de millones de dólares más de bienes agrícolas estadounidenses para apaciguar una prolongada guerra comercial.

Pekín. China no aumentará sus cuotas anuales de importación de maíz, trigo y arroz con bajos aranceles para facilitar el aumento de las compras de productos agrícolas de Estados Unidos, según dijo Han Jun, un alto cargo de agricultura, en comentarios recogidos por el grupo chino de medios de comunicación Caixin.

Los comentarios ponen de relieve el deseo de China de proteger a sus agricultores en un momento en que se encuentra bajo presión para comprar miles de millones de dólares más de bienes agrícolas estadounidenses para apaciguar una prolongada guerra comercial, aunque sus importaciones de granos han estado muy por debajo de los niveles de las cuotas en los últimos años.

Operadores del mercado y analistas dijeron que el anuncio parecía destinado a atender las preocupaciones en China, ya que Pekín se prepara para comprar más productos agrícolas estadounidenses.

“Esto sirve para calmar los nervios del mercado”, dijo Meng Jinhui, un analista de maíz de Shengda Futures. “Creo que el mercado está preocupado por el impacto de un eventual aumento de las importaciones de cereales, y ese (mensaje) ha llegado a la alta dirección”.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo en diciembre que China probablemente duplicará los US$24.000 millones de compras de productos agrícolas estadounidenses antes de la guerra, como parte de un acuerdo comercial de Fase 1 que se firmará este mes.

Han, viceministro de agricultura y parte del equipo de negociación, dijo el mes pasado que China compraría más trigo, arroz y maíz de Estados Unidos, lo que llevó a especular que Pekín podría aumentar las cuotas anuales de la cantidad de trigo, maíz y arroz que se puede importar a una tasa arancelaria del 1%.

Según Caixin, Han dijo que la cuota se ofrece a los mercados mundiales y “no la ajustaremos para un solo país”.

En 2017, antes de que comenzara la guerra comercial, las compras de los tres productos de Estados Unidos ascendieron a solo unos US$534 millones, lo que deja margen para un aumento significativo de las importaciones dentro de las cuotas existentes.