Al igual que los estados de Estados Unidos, Puerto Rico, un Estado libre asociado a la mayor economía del mundo, no puede solicitar protección por bancarrota.
La precandidata demócrata para la presidencia de Estados Unidos Hillary Clinton dijo el martes que las entidades públicas de Puerto Rico deberían poder usar leyes de bancarrota estadounidenses para reestructurar cerca de US$72.000 millones en deuda.
Al igual que los estados de Estados Unidos, Puerto Rico, un Estado libre asociado a la mayor economía del mundo, no puede solicitar protección por bancarrota.
Pero a diferencia de los estados de la Unión, las entidades públicas de Puerto Rico, incluyendo municipalidades, no están cubiertas por el Capítulo 9 de las leyes de bancarrota de Estados Unidos.
El delegado de Puerto Rico en el Congreso de Estados Unidos, que no tiene derecho a voto, ha pedido una legislación que permita a Puerto Rico acceder a las mismas leyes por bancarrota disponibles a otras municipalidades, al igual que el gobernador de la isla, Alejandro García Padilla.
La Corte de Apelaciones de Estados Unidos ratificó este lunes la decisión de primera instancia para anular la legislación puertorriqueña destinada a conceder a los distritos locales el derecho de entrar en bancarrota, pero dijo que excluir a las entidades públicas del estado libre asociado de una ley federal de quiebras era inconstitucional.
"El Congreso y el Gobierno de Obama necesitan asociarse con Puerto Rico, entregándole un respaldo real y herramientas de modo que Puerto Rico pueda hacer el trabajo duro que tomará para entrar a una senda hacia la estabilidad y la prosperidad", declaró Clinton en un comunicado entregado a Reuters.
"Como primer paso, el Congreso debería dar a Puerto Rico la misma autoridad que ya tienen los estados para permitir que entidades gubernamentales severamente atribuladas, incluyendo municipalidades y corporaciones públicas, reestructuren sus deudas en virtud del Capítulo 9 de la Ley de Bancarrota", agregó Clinton.
La Casa Blanca dijo la semana pasada que "no hay nadie en el Gobierno" que esté "contemplando un rescate federal de Puerto Rico", pero que el Congreso debería "dar una mirada" para ver si las corporaciones gubernamentales de la isla pueden acceder a la protección por bancarrota en virtud al Capítulo 9.
Clinton afirmó en el comunicado que la aplicación "inconsistente e incoherente" de la ley federal estadounidense ha contribuido a la situación económica actual de Puerto Rico y observó que los precios elevados de los servicios básicos y el alto nivel de desempleo han llevado a una economía que se ha contraído en ocho de los últimos nueve años.