Esta es la primera vez en la historia que un presidente no procedente de América Latina gobierna la institución. Se trata de un anticastrista de "línea dura" con amplia experiencia profesional tanto en funciones de gobierno como en el área del lobby.
Washington. El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) elegió el sábado de forma telemática a Mauricio Claver-Carone, considerado afín al presidente estadounidense, Donald Trump, como nuevo presidente de la entidad, y sustituirá en el cargo a Luis Alberto Moreno a partir del próximo 1 de octubre. Esta es la primera vez en la historia que un presidente no procedente de América Latina gobierna la institución.
"La Asamblea de Gobernadores del BID eligió a Mauricio J. Claver-Carone como Presidente por un período de cinco años que comienza el 1 de octubre de 2020", ha informado el organismo en un comunicado.
Claver-Carone, nacido en Miami y criado en Madrid, se impuso en la votación telemática y a puerta cerrada tras una dura campaña. Se trata de un anticastrista de "línea dura" con amplia experiencia profesional tanto en funciones de gobierno como en el área del lobby, desde donde ha buscado influir en la formación de políticas públicas en materia internacional con énfasis en América Latina y, en especial, hacia Cuba.
Durante el gobierno de George W. Bush trabajó en el Departamento del Tesoro y, tras la victoria de Donald Trump, volvió al Gobierno inicialmente como miembro del equipo de transición. Está vinculado estrechamente con el senador republicano por Florida Marco Rubio y está considerado uno de los impulsores de la marcha atrás en la política aperturista hacia Cuba del expresidente Barack Obama y de la imposición de sanciones a Venezuela.
Tras un breve periodo como representante de Estados Unidos ante el Fondo Monetario Internacional, Claver-Carone fue nombrado responsable de temas del hemisferio occidental en el Consejo de Seguridad Nacional y asesor especial de Trump en esta materia.
El periodo de postulación de candidatos concluyó el jueves y la asamblea de gobernadores recibió de los Estados Unidos, El Salvador, Guyana, Haití, Israel y Paraguay la propuesta de un solo candidato, Mauricio Claver-Carone, actualmente director de asuntos del hemisferio occidental en el Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos.
Cuando no ocupaba cargo público, Claver-Carone dirigía la empresa de lobby US-Cuba Democracy PAC, cuyo objetivo es influir en las políticas de Washington para lograr una transición de la isla hacia la democracia y hacia el libre mercado. Además ha sido profesor de la Facultad de Derecho de la Universidad Católica de Estados Unidos y del Centro de Derecho de la Universidad George Washington.
Polémica elección. El camino del estadounidense-cubano Claver-Carone se allanó tras la retirada del candidato argentino, Gustavo Béliz, que era la opción alternativa ante la postura norteamericana.
Según el propio Claver-Carone, hasta 17 países iban a apoyar su candidatura. Entre ellos, posturas relevantes como la de Estados Unidos, que cuenta con el 30% de los votos, Brasil (11,3%) o Colombia (3,1%). "Estamos ganando 17-4, si uno gana 17-4 va bien", destacó el hombre de confianza de Donald Trump antes de la votación.
Su nombramiento ha provocado el desacuerdo de varios países de la región, entre los que se encuentran México, Argentina, Costa Rica o Chile, además de la Comisión Europea, ante la llegada del primer presidente estadounidense en la institución.
Además, el grupo de países esgrimía que la pandemia de coronavirus ha impedido realizar conversaciones sobre la elección de manera presencial. "Hacienda coincide en posponer la elección de presidente de este organismo hasta que haya condiciones para ello, sobre todo para dialogar y definir el papel que tiene esta institución ante los desafíos sociales y económicos que plantea la coyuntura de la COVID-19", destacaba la secretaría de México en su cuenta de Twitter.
Por su parte, el ministro de Relaciones Exteriores de Chile, Andrés Allamand, señaló que "bajo ninguna circunstancia es razonable tensionar la gestión que tiene que hacer el banco en la región con motivo del recambio de autoridades". "Desde su origen el BID ha funcionado con una lógica de un presidente latinoamericano y un vicepresidente estadounidense y no vemos razón para cambiar", apostilló el ministro.
Por su parte, la expresidenta de Costa Rica y representante del país para presidir el organismo, Laura Chinchilla, anunció su decisión de retirar su candidatura en el proceso ante la posible elección de Claver-Carone.
La expresidenta explicaba que la elección del abogado de formación supondría una señal "en extremo preocupante" para la gobernanza que debe regir en dicha institución, puesto que, según Chinchilla, está obligada a apegarse "estrictamente a las normas escritas y a generar certidumbre, confianza mutua y previsibilidad en sus actuaciones".
"Intento de secuestrar" las elecciones. En este contexto, Claver-Carone denunció antes de la votación un "intento de secuestrar" las elecciones liderado por Argentina, lo que sería enfrentado por Estados Unidos "muy profundamente", advirtió.
"Cualquier intento de secuestrar con una minoría de países una elección, a pesar de un reglamento muy claro que se llevó a cabo el 9 de junio, sería no solamente no democrático, sino también un esfuerzo que los Estados Unidos van a retar muy profundamente", señaló durante una rueda de prensa.
El candidato aseguró que el país norteamericano no tenía "ninguna intención imperialista" hacia la región latinoamericana. "Estados Unidos no tiene ninguna intención imperialista hacia el hemisferio occidental", remachó.