Los pronósticos de expertos consultados por Reuters apuntaron a que el peso mexicano y el real brasileño, las principales divisas de América Latina, seguirán dentro de rangos recientes o cerca de los niveles presentes en el inicio del año.
Buenos Aires. Las monedas latinoamericanas se moverán cuidadosamente en el comienzo del nuevo año de cara a las continuas tensiones políticas en la región y las preocupaciones sobre más expresiones de proteccionismo en la campaña presidencial estadounidense, mostró un sondeo de Reuters este jueves.
Los pronósticos apuntaron a que el peso mexicano y el real brasileño, las principales divisas de América Latina, seguirán dentro de rangos recientes o cerca de los niveles presentes. El sondeo fue recopilado del 6 al 9 de enero, en medio del inicio de la última escalada Estados Unidos-Irán.
El corto plazo luce positivo debido a la actitud prudente del banco central mexicano y algunas señales de mejora en la economía brasileña, dijo Juan Prada, un estratega de Barclays. Sin embargo, el segundo semestre de 2020 podría resultar más desafiante.
"Las elecciones en Estados Unidos y posibles amenazas sobre el comercio y la inmigración, junto con un deterioro institucional en México hacia el tercer año de AMLO, pueden traer riesgos a la baja más adelante en 2020", agregó, refiriéndose al presidente Andrés Manuel López Obrador.
De su lado, el presidente estadounidense Donald Trump podría recurrir a embestidas contra México en temas de comercio y migración para fortalecer su base política y sus probabilidades de reelección, en forma similar a su exitosa incursión en 2016 para alcanzar la Casa Blanca, dicen analistas.
El peso terminó 2019 con una ganancia de 3,6% que principalmente se produjo sobre el final del año después de que se acordaran cambios en el tratado comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (TMEC) tras meses de tironeos para asegurar normas laborales más estrictas en México.
El peso mexicano se cotizaría a 19,50 por dólar en 12 meses, debilitándose 3,9% desde sus valores del jueves, pero continuando dentro de una banda de negociación bien establecida por cuarto año, de acuerdo a la estimación mediana de 22 estrategas.
Banxico, como se conoce al banco central del país, ha estado recortando su tasa referencial gradualmente para ayudar a reactivar un crecimiento que se ha mostrado anémico, generando dudas entre inversores sobre el valor de "carry trade" de la divisa a futuro.
El mes pasado, los funcionarios pusieron de relieve su preocupación de que una reciente subida del salario mínimo pudiera agitar las presiones inflacionarias, lo que podría significar que podrían abstenerse de un alivio monetario más agresivo en los próximos meses.
En tanto, un clima político más duro que envolvió a Latinoamérica al final de 2019, con una inusual aspereza entre Brasil y Argentina y un brote de protestas en los países andinos, también pesará sobre los mercados cambiarios de la región.
"Uno de los principales factores que afectaría a la economía brasileña es la nueva orientación de política económica de Argentina, la cual se espera sea más proteccionista e incida incluso en un menor comercio del que ya muestra", dijo esta semana un reporte de la firma peruana Phase Consultores.
Los encuestados esperan que el real se fortalezca un 1,7% en 12 meses a 4 unidades por dólar. Mientras, la expectativa es que la moneda brasileña se debilite en tres meses, una rara previsión para el corto plazo que refleja la cautela de los analistas.