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El IVA en América Latina: ¿hacia dónde va la tendencia?
Martes, Junio 25, 2024 - 18:30
IVA. Foto: Unsplash.

En medio de una dinámica regional de ajustes fiscales, este impuesto se convierte en el epicentro del debate económico en la región. Mientras varios países siguen la tendencia mundial de aumentarlo o ampliar los sectores donde se aplica, surge la interrogante sobre las razones detrás de esta movida tributaria.

El Impuesto al Valor Agregado (IVA) o el Impuesto General a las Ventas (IGV), es uno de los impuestos más importantes en los sistemas tributarios de América Latina. En los últimos meses, varios países de la región están siguiendo la tendencia mundial de aumentar el impuesto o ampliar los sectores donde se aplica. ¿Por qué? 

“Es el impuesto más recaudado por su baja susceptibilidad a la evasión fiscal”, explicó Juan Carlos Martinez Lázaro, profesor de economía en IE Business School

De acuerdo con la firma legal Baker & McKenzie, el promedio del IVA que se cobra a nivel mundial es de 15%, mientras que en América Latina el porcentaje bajaría a 9%. Sin embargo, en Uruguay y Argentina, al igual que en países de la Unión Europea, su valor asciende al 22% y 21%, respectivamente, debido a que su sistema tributario descansa preponderantemente en este impuesto.  

“El 47% de la recaudación tributaria que hemos tenido en lo que va del año proviene del IVA, lo cual resulta problemático porque es un impuesto regresivo”, comentó Germán Deagosto, economista uruguayo

Esto, debido a que las personas con menores ingresos tienden a gastar una mayor proporción de su salario en bienes y servicios básicos en comparación con las personas de mayores ingresos, por lo que la carga del impuesto recae de manera desproporcionada. Problema similar enfrenta Colombia, donde las grandes empresas pagan proporcionalmente menos impuesto de renta que las pequeñas y medianas empresas (pymes), según el último informe del Observatorio de Fiscal de la Universidad Javeriana. 

La complejidad del sistema tributario, caracterizado por diversas tasas y exenciones a nivel federal, estatal y municipal, impacta significativamente a países como Brasil y Perú. En Ecuador, se aumentó el IVA del 12% al 15% en abril, extendiendo este incremento a productos esenciales como combustibles y gas doméstico. Por otro lado, México se adelanta al poner en debate los impuestos que deberían pagar los actores involucrados en las compras online

“El desafío es movernos de un impuesto tributario indirecto a otros progresivos directos”, sentenció Deagosto. 

En el marco de la discusión que se está teniendo a nivel país y global, el planteamiento de "reformas de segunda generación" para encontrar un alivio fiscal se centra en opciones como la "personalización" del IVA y la implementación de medidas más específicas tributarias. 

¿IVA PERSONALIZADO?

La tasa estándar del IVA en Uruguay es del 22%, lo cual es comparable a países como Argentina (21%), Chile (19%) y Brasil (que tiene múltiples tasas del 17% al 25%). 

Sin embargo, los dos primeros destinos comparten una notable disparidad de precios, especialmente perceptible en los viajes “turísticos” desde Salto, Uruguay, hasta Concordia, Argentina, a través del puente internacional General Artigas. 

Y es que hasta hace siete meses, los alimentos básicos eran un 180% más económicos en territorio argentino. Incluso en la actualidad, cruzar la frontera resulta conveniente debido a un descuento del 54%. 

“Esta disparidad plantea la cuestión de qué herramientas de política económica, particularmente en términos tributarios, pueden utilizarse para mitigar el impacto en la actividad económica del litoral”, dijo Germán Deagosto. 

Según Statista, Uruguay tiene el costo de vida más elevado de América Latina, y ocupa el lugar 37 en una escala entre 146 economías, por encima de Japón (47) o España (54), de acuerdo con la base de datos colaborativa Numbeo. 

Diversos especialistas explican que se debe a la suma de una alta carga impositiva, regulaciones, subsidios cruzados y factores macroeconómicos, como el atraso cambiario y la política monetaria restrictiva para combatir la inflación. Pero la principal razón radica en la falta de buenos acuerdos comerciales, lo que resulta en aranceles de entre el 25% y 35%. Además, al incluir una tasa consular del 5%, un producto importado puede enfrentar una carga tributaria total del 50%. 

“Aprovechando las herramientas tecnológicas y la información, se puede ir hacia una solución de 'IVA personalizado' que distinga las situaciones a nivel socioeconómico”, explicó el economista uruguayo. 

En la tendencia de la globalización, no es 'loco' pensar que se incremente el número de empresas con actividades pero no presencia física en un país, continuó, por lo que se hace una necesidad adecuar los sistemas tributarios nacionales a particulares tipos de situaciones sociales y económicas para que no resulten afectadas las poblaciones más vulnerables. 

En la actualidad, Uruguay ofrece descuentos en el IVA si se realiza el pago con tarjeta de débito, así como un 10% de descuento en productos seleccionados. Además, existe el uso comercial de los "Días sin IVA". En contraste, después de siete años de exenciones, se ha reinstaurado el impuesto a la compra de carnes de pollo, cerdo y cordero. 

Mientras, Argentina recientemente empezó a cobrar IVA a los servicios en general, que antes no estaban gravados. 

DESIGUALDADES EN EL SISTEMA

El rol del IVA en Colombia ha sido objeto de un intenso debate en los últimos años, especialmente en relación con su impacto en la economía y la recaudación fiscal. Desde 2017-2018, el país ha adoptado una postura proactiva al gravar los servicios digitales y las compras en plataformas electrónicas, convirtiéndose en un referente regional en términos de recaudación.

Una de las principales ventajas de este enfoque es la facilidad de recaudación que ofrece, especialmente en un mundo cada vez más digitalizado.

“Plataformas como Uber, Airbnb, Netflix, Amazon y Alibaba han estado contribuyendo al IVA, ya que el impuesto es asumido por el cliente, lo que garantiza un flujo constante de ingresos al Tesoro Nacional”, explicó Lisandro Junco, exdirector de la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales en Colombia (DIAN)

Por su lado, en Chile, desde que se promulgó como ley el impuesto a las plataformas de streaming en febrero de 2020, proyectaron que para 2024 en adelante el aporte a las arcas fiscales sería de US$ 241 millones anuales. En esa misma línea, en Perú el ministro de Economía y Finanzas, José Arista Arbildo, señaló en abril último que estimaba una recaudación de alrededor de US$ 310 millones al año con la aplicación del IGV a los servicios de streaming como proveedores de películas por medio de internet. 

“La tasa del impuesto ya está, es 18%, lo que pasa es que en este caso el proveedor es externo. Cuando se hizo la Ley del IGV siempre se pensó que el proveedor del servicio era interno”, explicó el atraso de la implementación del impuesto en el país.

No obstante, así como se agrega, también se solicita su devolución. En abril, el Gobierno de Chile presentó el Proyecto de Ley de Medidas para la Reactivación del Turismo, con el que se pretende dinamizar y dar un nuevo impulso al sector con medidas como la devolución del IVA a los turistas extranjeros por comprar bienes en el país. 

En el caso de Colombia, la estructura actual “adelantada a su tiempo” ha sido objeto de críticas, especialmente en lo que respecta a los bienes exentos, como los alimentos básicos (carne, pescado, arroz, leche y huevos) que ha generado desequilibrios y críticas en cuanto a su efectividad como un impuesto progresivo.

El hecho de que ciertos productos, como cortes finos de carne y mariscos, no estén gravados con IVA ha llevado a cuestionamientos sobre la equidad del sistema. Se ha propuesto gravar estos productos y devolver el IVA a través de transferencias sociales, pero esta medida no ha sido aprobada, lo que ha dejado al país rezagado en comparación con otras naciones de la región.

Y es que además, impacta en la industria agrícola y manufacturera. Recientemente generó controversia al exponerse que las grandes empresas pueden beneficiarse de los IVA descontables al vender productos exentos, mientras que los pequeños productores pueden no tener la misma capacidad para aprovechar estas deducciones, lo que genera desigualdades en el sistema.

“En este sentido, se ha propuesto cambiar la clasificación de ciertos productos de exentos a excluidos, lo que eliminaría la necesidad de declaración y devolución de IVA, beneficiando así a los pequeños productores”, explicó Junco. 

Este es un problema que también enfrenta Perú, debido a que la declaración de impuestos por medios digitales es un reto para las pymes, que representan el 99,6% del total de empresas en el país, según el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI). Además, cabe considerar que un impuesto como el IVA no es tan beneficioso para Perú, país donde el 78% es informal. 

El debate sobre el tipo de impuesto más eficiente ha llevado a comparaciones entre el IVA y el impuesto al consumo. 

“Aunque el impuesto al consumo puede ser más eficiente en términos de recaudación, puede desincentivar la industria nacional al gravar los insumos utilizados en la producción. Por otro lado, el IVA permite a las empresas deducir los impuestos pagados en insumos, lo que puede reducir el costo final de los productos y mejorar su competitividad”, argumentó el exdirector de la DIAN.

El IVA es un impuesto con rol en los países latinoamericanos. Por ello, y porque los países la implementan a diferentes productos y servicios en diferentes años, es que Deagosto considera que la “personalización” del IVA es la solución que se postula como estándar para todos los países, pues vela por cada persona al considerar factores socioeconómicos. 

“Tal vez incluso, con el nivel de tecnología e información actual, podemos hablar de una tasa básica [y evitar añadir a la mezcla confusas y no detalladas excepciones]”, dijo. 

Esta propuesta lleva un par de años rondando en el Congreso de Uruguay, sin concretarse ni marcar un inicio, finalizó.   

La evolución del IVA, en su forma y aplicación, seguirá siendo un indicador clave de cómo los países de América Latina adaptan sus economías a las realidades contemporáneas, buscando un equilibrio entre recaudación y justicia social. 

Países

Autores

Dax Canchari