Santiago Peña ratificó que no impulsará negociaciones del acuerdo comercial con Unión Europea (UE) después del 6 de diciembre, cuando asume presidencia pro tempore del bloque Mercosur.
"Yo he dicho y le he transmitido esto al presidente (de Brasil, Luiz Inácio) Lula (da Silva) que cierre la negociación, porque si él no cierra, yo no voy a continuar en el próximo semestre", afirmó Peña en una conferencia de prensa desde la residencia presidencial paraguaya.
Peña explicó que el 6 de diciembre tendrá lugar la cumbre del Mercado Común del Sur (Mercosur), el mecanismo conformado por Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay. En esa fecha, Brasilia traspasará la presidencia pro tempore a Asunción.
El presidente de Paraguay, Santiago Peña, ha asegurado que si no se concluye antes del 6 de diciembre un tratado comercial entre el Mercosur y la Unión Europea, el bloque sudamericano se retirará y comenzará a negociar con países asiáticos.
"Yo voy a dedicarle el próximo semestre a cerrar acuerdos con otras regiones del mundo que yo estoy seguro que vamos a llegar a un acuerdo muy rápidamente", avisó el líder paraguayo.
Mercosur: 6 de diciembre, fecha límite para cerrar acuerdo con la UE
Así lo aseguró Peña en entrevista en el diario británico Financial Times, en la que expresa su frustración por unas negociaciones que se extienden más de 20 años, dejando claro que “o cerramos antes del 6 de diciembre o no cerramos”.
Este ultimátum se suma al ya esbozado el pasado junio por el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, cuyo país ejerce la presidencia de turno de Mercosur y quien dio de plazo hasta finales de este año para lograr cerrar el acuerdo entre la UE y el bloque suramericano. “Si hay alguien que puede cerrar el acuerdo es Lula… Será este año o no será, no pasará nunca”, añade Peña en la entrevista.
La UE y Mercosur llegaron en 2019 a un acuerdo de asociación, pero las discusiones se han complicado por la aparición de nuevas demandas desde ambos lados de la mesa. Entre ellas, exigencias adicionales en materia ambiental, condensadas en una carta remitida por la UE al Mercosur en febrero pasado y a la que los suramericanos respondieron recientemente para avanzar en las negociaciones.
Mercosur considera que las pretensiones europeas en materia ambiental son “inaceptables”, conllevan amenazas de sanciones y podrían representar una barrera para sus exportaciones a la UE.