Algo que debes tomar en cuenta es que la primera carilla, si es que tienes más, es la trascendental. Con esta o ahuyentas al reclutador o lo invitas a que siga sabiendo de ti.
Es la carta de presentación de una persona. Tu currículum vitae (C/V) habla mucho de ti cuando estás en la búsqueda de un trabajo. Y habla para bien o para mal, eso depende de cómo lo hayas elaborado.
Algo que debes tomar en cuenta es que la primera carilla, si es que tienes más, es la trascendental. Con esta o ahuyentas al reclutador o lo invitas a que siga sabiendo de ti.
El reclutador toma tan solo unos segundos, algunos entre 10 y otros máximo 60, para ubicar tu C/V en el área de preseleccionados o en el tacho de basura.
Para evitar lo último, toma nota de estos 10 tips para que tu hoja de vida tenga éxito y puedas conseguir el trabajo que anhelas.
1) Información precisa, verídica y clara
Mientras menos experiencia tienen los postulantes, más rellenan su currículum vitae, lo cual es un grave error y es probable que el reclutador envíe esa hoja de vida directo al tacho. No engañes al reclutador. Si no tienes mucha experiencia (o ninguna), exprésalo en tu C/V. Y si has tenido muchos trabajos, elige los mejores. Un reclutador prefiere poca experiencia pero de calidad. También debes contar con un C/V sin errores ortográficos, con frases claras, bien estructuradas y que lo que expliques sea sin rodeos. Sé puntual con lo que quieres decir. Aunque tengas menos información pero si los datos son de calidad, empezarás a llamar la atención en los departamentos de Recursos Humanos (RR.HH.). Los expertos recomiendan que cada C/V tenga máximo dos carillas; si tiene una sola, mucho mejor.
2) La foto de mi C/V
Tanto Carlos Haz, director financiero de Maruri y reclutador de la misma empresa; como Juan Francisco Gallo, jefe de RR.HH. de Indusur-Induauto, sugieren que los postulantes no añadan foto a sus C/V.
"A veces uno se forma una idea errónea del postulante solo con ver su foto. Hay que motivar al reclutador a que te llame y la foto, personalmente, no creo que motive en la mayoría de los casos", dice Haz.
Gallo resalta que la actual Ley Laboral no obliga a los postulantes a utilizar fotografías porque puede ser usado de forma discriminatoria. "Como reclutador, tampoco me interesa el tema foto. Últimamente se ha vuelto común ver en los currículums fotos del postulante en algún viaje, una selfie, y esa imagen lo aleja de lo profesional", relata.
Por estas razones, evita utilizar foto, a menos de que esta cumpla los estándares para que te muestren como un buen profesional.
3) Experiencia o estudios, ¿qué tiene más peso?
Parece mentira, pero lo cierto es que un reclutador prefiere que el postulante presente primero su experiencia laboral y después sus credenciales académicas, sean estas secundarias o universitarias. Esto no significa que una pese más que la otra, pues ambas son muy importantes.
Gallo relata que un empleador quiere reconocer, en la experiencia del postulante, si este ha tenido estabilidad laboral y cuál ha sido la empresa en la que trabajó antes. "Un reclutador busca que el empleado sea estable, porque seleccionar al personal es un proceso caro, se invierten mucho tiempo y esfuerzos para encontrar a alguien que cumpla con los requisitos. Por eso no me sirve si alguien no ha tenido estabilidad, ya que después de tres o seis meses puede dejar el puesto y uno debe volver a la búsqueda", explica.
Salvo casos como que no hayas tenido experiencia profesional antes porque recién te encuentras en la búsqueda de tu primer empleo o porque tu trabajo anterior no tiene relación con el cargo que buscas, entonces sí es acertado que ubiques primero tus estudios realizados.
4) Mientras más experiencia, ¿mejor?
La respuesta es "No". El reclutador prefiere que el paso del aspirante en las empresas no haya sido efímero, pues es una pésima carta de presentación demostrar que, por ejemplo, un joven profesional de 28 años haya tenido hasta esa edad 10 diferentes empleos y que en ninguno haya superado al menos un año de permanencia en el cargo. Tampoco es válido exponer en tu C/V muchos otros empleos que no sean afines al perfil del profesional; es decir, si un contador que está postulando a un cargo de esa rama ha tenido múltiples empleos pero en ninguno ha ejercido la contaduría desde ya tiene un problema. Pero si ese profesional sí ha tenido al menos un empleo relacionado a esa especialidad, es preferible ubicar solo ese e ignorar los demás, a menos que sean afines, como administración, comercio, etcétera.
Gallo sostiene que es mejor ubicar, al final de cada experiencia laboral, el nombre y contacto de tus exjefes, así lo que escribiste acerca de tu experiencia tendrá mayor sustento y, en caso de duda, el reclutador llamará a tu exjefe para confirmarlo.
5) Solo ciertos cursos y talleres
Haber hecho un curso del manejo de Microsoft Excel no va a asegurarte un trabajo. Según Haz, con los actuales avances tecnológicos, dominar Excel hoy ya no es un privilegio; de hecho, el no saber manejar este tipo de programas de Microsoft puede perjudicarte en la búsqueda de un trabajo.
No obstante, si has hecho cursos muy especializados y están acordes al cargo al que aspiras, eso sí es importante precisarlo.
Ejemplo: Si quieres trabajar como diseñador gráfico o web, será muy bueno que hayas hecho cursos de Photoshop, InDesign, Flash, Acrobat o Shrink O'Matic.
6) Dominio de idiomas, sí
Hay avances tecnológicos, pero Ecuador no ha avanzado en la educación de idiomas. Por eso, los reclutadores tienden a bien considerar los C/V de aquellos postulantes que dominan otras lenguas, principalmente el inglés, aunque el cargo no lo requiera, puesto que en ocasiones las empresas eligen a sus trabajadores para ascensos o traslados en los que es indispensable el dominio de ciertos idiomas para tratar con clientes o con otros empresarios. Si no dominas otro idioma pero estás en un nivel intermedio, no está mal que expreses que tienes buenos conocimientos en aquel idioma.
7) ¿La empresa valora los premios?
En este ítem, todo depende. Si un postulante recién graduado no tiene experiencia, pero sí premios importantes (tipo El Cóndor en publicidad, o haber ganado una beca o incentivo nacional o internacional por algún proyecto), es meritorio dar esa información.
Sin embargo, es totalmente innecesario indicar premios obtenidos en la secundaria (como haber ganado un concurso de caligrafía o haber sido el mejor egresado de tu promoción), salvo excepción de que seas bachiller y estés en busca de tu primer empleo.
8) Evita alabarte
Eso significa: no hobbies ni textos que digan lo buena gente que eres. Deja que tu experiencia, tus estudios y tus referencias sean las únicas en hablar bien de ti. A los reclutadores solo les importa qué puedes hacer por la empresa.
9) Las referencias
Casi al final de los C/V se deben escribir quiénes son tus referencias. No abuses del número de ellas. Basta con dos o tres que puedan dar una buena referencia de ti y que tengan peso en otras empresas, pueden ser desde tus exjefes hasta compañeros de maestrías o profesionales con los que hiciste prácticas profesionales.
No es conveniente que tus referencias sean familiares, pues el reclutador no las tomará como imparciales.
La página psicologiaymente.net dice que no es necesario mencionar referencias. En la nota indica que si el empleador está interesado en tu perfil, se comunicará contigo para que le proporciones el contacto de referencias.
Tú decide si las vas incluir... Y a quiénes.
10) Crearse un perfil en LinkedIn
Los reclutadores también se están volcando a la tecnología para decidirse por un postulante. La red profesional LinkedIn permite a los usuarios revelar libremente su información, como destrezas, experiencias, estudios y contactos, además de permitir a sus conocidos validar aptitudes y conocimientos; también se puede seguir a influencers, empresas y universidades, e incluso subir al perfil desde C/V (formato PDF) que previamente ya hayas elaborado y hasta crear un videocurriculum.
Imágenes | Flickr