El director de la Cámara de Comercio Ecuatoriana China explica la importancia de un TLC, y da su criterio sobre temas polémicos de la relación con su país.

Andrés Zhang, director de la Cámara de Comercio Ecuatoriano China, explica la importancia del acuerdo comercial con China que debe ser ratificado por la Asamblea Nacional. Vive 28 años en Ecuador y también se refiere a los casos polémicos que se han dado tanto en el tema de la deuda con China, el caso de Coca Codo Sinclair y la flota china en Galápagos. Considera que muchos de los temas se pueden arreglar conversando.

Las declaraciones las da en medio de el inicio de la feria ExpoChina, que por primera vez se realiza en Quito. Antes se han dado doce ediciones en Guayaquil. En el evento, que se realiza en el Centro de Convenciones Metropolitano, están empresas chinas y ecuatorianas en sector minería, tecnología, logística, consultoría y automotriz.

¿Cómo ve usted la penetración de China en el mercado ecuatoriano?

Estamos en el mejor momento de la relación bilateral, en la parte económica, comercial, política, de intercambio cultural entre Ecuador y China. China es el socio comercial número uno, superando a Estados Unidos con US$ 12.000 millones de intercambio comercial. Como Cámara de Comercio estamos impulsando este tan anhelado tratado de libre comercio, firmado en el Gobierno anterior y ratificado en la Corte Constitucional. No hay cláusulas que comprometen la soberanía. Ahora estamos en la etapa de la Asamblea, luego iría al Registro Oficial y entraría en vigencia. Una vez que esto suceda más del 90% de la oferta ecuatoriana entraría sin aranceles.

¿Cuáles son los productos que más se beneficiarían?

En este momento lo que más se vende es el camarón un rubro muy grande, y le sigue la minería. En el camarón tenemos un 10% de arancel, y va a ser gradualmente reducido a 0% un punto por año, es decir llegaría a cero en 10 años. Igualmente el banano.

¿Es un poco lenta esa desgravación?

Sí es un poco lento, pero es algo que hay que trabajarlo desde ahora. Pero hay otros rubros como pitahaya con 20% de aranceles, pero con la vigencia del TLC entraría con 0% desde el primer día.

¿Desde China cuál sería la oportunidad de sus productos?

Ecuador y China son economías complementarias. Existe una simbiosis entre ambos. China fabrica productos de uso cotidiano. Está innovando en la cuarta revolución industrial como son inteligencia artificial y el internet de las cosas. Ecuador en cambio nos puede brindar la seguridad alimenticia. China tiene una quinta parte de la población del mundo y solo 7% de territorio cultivable. La tierra de China es muy estresada. En cambio, en Ecuador hay una tierra fértil, agua cristalina.

Es interesante que Ecuador importa principalmente materia prima y bienes de capital de China. China necesita de alimentos. Incluso el año pasado hubo un pequeño superávit para Ecuador en la balanza, pero el reto de Ecuador es mantenerla. Hay que aperturar más la oferta exportable y lograr más permisos fitsanitarios para productos como arándanos, aguacate, uvilla, camote. Hay que fortalecer a Agrocalidad.

¿Cómo ve la participación futura en otras cosas como petróleo y minería?

A pesar de que el mundo está yendo hacia la energía renovable, no podemos dejar de lado al petróleo. No solo se produce combustible, este está en todo lado. Al ser un país petrolero, es importante la relación, pues China necesita de esta materia prima. Hay una buena oportunidad de seguir trabajando en lo petrolero y minero. Mucho de ese petróleo fue prevendido, pero Ecuador tiene potencial de duplicar la producción.

Pero más bien la ciudadanía ha dicho que hay que cerrar la llave del Yasuní, no habría esa oportunidad...

Hay un dicho que la voz del pueblo es la voz de Dios y hay que respetar lo que ha dicho, pero el petróleo es un elemento del cual se puede sacar provecho y se beneficia la sociedad.

Hay una percepción sobre una deficiencia en calidad del producto de China, ¿qué puede decir a los consumidores?

Eso es una evolución. Si vemos el producto japonés de la década del 60 del siglo pasado, tenía problemas. Pero con el tiempo uno se adapta y supera el nivel de calidad. Hace 20 años no se escuchaba que China estuviera a la vanguardia de la tecnología. En cambio, China se da cuenta que la evolución hacia la calidad es un paso necesario.

También existe una suerte de recelo sobre las operaciones de crédito, que había condiciones muy fuertes para el país, se habla de coimas, de corrupción. ¿Como piensan ustedes para mejorar esa percepción o limpiar esa imagen?

Como Cámara nos encargamos del tema comercial. Pero desde el punto de vista personal, me parece que es una percepción muy exagerada porque en Ecuador, al momento, la deuda más grande no es con China. Es mínima, hay que reconocer que muchos de los créditos son preferenciales del Eximbank, con tasas de menos de 3%. Ecuador tiene un riesgo país de 2.000 puntos y no tienen acceso a financiamiento y es importante, que mucho de los créditos de multilaterales, por ejemplo Fonde Monetario Internacional (FMI) o Banco Mundial, te atan a cierta condición política o de soberanía.

Hay interferencia en las decisiones internas. A diferencia de China, que simplemente damos un crédito para ciertos proyectos estratégicos, pero en ciertas condiciones de que trabajen empresas chinas, pero sí existe 30 % de valor agregado ecuatoriano. Es un crédito a baja tasa y se benefician ambas partes. La política exterior se basa en tres pilares: respeto mutuo, convivencia pacífica y beneficio mutuo. Es el mismo crédito que ofrece al mundo a través de “la nueva ruta de la seda”.

¿Como puede Ecuador negociar de igual a igual el tema comercial si existe una deuda, problemas con Coca Codo?, son tantos pesos...

Lo más fundamental es la comunicación, sentarse y hablar, para encontrar soluciones. Usted ha mencionado Coca Codo. Ahora genera el 30% de electricidad. Se ha visto mayor producción, menor costo de la energía y más industrialización. Al mismo tiempo si existen problemas, pero se puede solucionar hablando.

Otro tema un poco conflictivo ha sido el tema de la flota china ¿Cómo lo ve?

Ambos lados hablan de su razón. Tal vez China dice estoy cumpliendo pues estoy en zona internacional, en cambio Ecuador dice están muy cerca de mi zona...

Pero si se han pasado, es decir han cruzado la línea...

Ahí es cuando cada uno habla de su punto de vista, pienso que si se requiere una buena mediación, para que ambos lados se sientan cómodos. Al mismo tiempo se ha visto que a través de ciertos acercamientos políticos se ha trabajado para que no haya mas roces.