El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, y el director general de Pemex, Octavio Romero, habían dicho públicamente que el país reanudaría las negociaciones con Vitol si se pagaba una compensación adecuada y la empresa entregaba los nombres de los implicados en el escándalo de corrupción.
La mexicana Pemex ha vuelto a hacer negocios con Vitol casi tres años después de que la petrolera estatal prohibiera los tratos con el mayor comerciante independiente de energía del mundo por un escándalo de corrupción.
Esta moratoria ocurrió luego de que Vitol reconociera públicamente en diciembre de 2020, en un acuerdo con el Departamento de Justicia de Estados Unidos, de que había pagado sobornos para conseguir negocios con Pemex, así como con empresas estatales en Brasil y Ecuador.
En los últimos días, dos buques que transportaban cargamentos de Vitol llegaron a dos puertos mexicanos, según informó Reuters citando dos fuentes familiarizadas con los acuerdos y que hablaron bajo condición de anonimato porque la información era "comercial y políticamente sensible".
Una tercera fuente comercial de alto nivel confirmó que Vitol había reanudado sus negocios con México.
Ni los acuerdos ni el hecho de que México reanudase el comercio con Vitol habían sido informados anteriormente.
Vitol, una multinacional de energía y commodities de origen neerlandés, declinó hacer comentarios, mientras que Pemex y el gobierno mexicano no respondieron a solicitudes de comentarios.
Lo que sí se sabe es que el buque Arvin, con bandera de Liberia, zarpó de Houston el 7 de septiembre, parcialmente cargado, con destino al puerto mexicano Pajaritos, según datos de la Bolsa de Valores de Londres (LSEG). Llegó a ese puerto dos días después y terminó de descargar el 15 de septiembre.
Por su parte, el buque Torm Thames, de bandera danesa, terminó de descargar el 13 de septiembre en el puerto mexicano de Tuxpan y se trasladó vacío al cercano Tampico, donde está fondeado, de acuerdo a datos de LSEG.
Registros del puerto mostraron que Arvin transportaba gasolina regular y MTBE, un aditivo para la gasolina sin plomo que aumenta los niveles de octanaje y oxígeno y reduce la contaminación. Torm Thames llevaba gasolina premium y MTBE.
Reuters no pudo determinar los términos del acuerdo entre México, uno de los mayores importadores de productos petrolíferos refinados del mundo, y Vitol.
El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, y el director general de Pemex, Octavio Romero, habían dicho públicamente que el país reanudaría las negociaciones con Vitol si se pagaba una compensación adecuada y la empresa entregaba los nombres de los implicados en el escándalo de corrupción.
Pemex luego reveló los nombres de dos exfuncionarios, pero no estaba claro qué compensación se pagó, si es que se concretó. La estatal dijo el año pasado que Vitol había ofrecido un monto por compensación, pero se desconoce si se hizo finalmente.
A raíz del escándalo de corrupción que sacudió a América Latina, Reuters informó que México estaba buscando renegociar algunos de sus contratos por valor de cientos de millones de dólares con la empresa con sede en Ginebra.
Romero, de Pemex, había dicho que la empresa se desharía de los términos que considerara desfavorables. Finalmente, los funcionarios de Pemex cancelaron las negociaciones contractuales después de que ejecutivos de Vitol rechazaron los cambios propuestos por la petrolera a los términos.
No estaba claro cuándo se reiniciaron las negociaciones, pero, mientras tanto, continúan los procedimientos legales en Estados Unidos.
A finales de agosto, Javier Aguilar, exgerente de una filial del grupo de empresas de Vitol, compareció ante el tribunal federal de Houston, según los registros. Estos mostraron que se presentó ante el tribunal el 21 de agosto, se declaró inocente y fue liberado con una fianza de US$ 100.000.
Se alega que el ejecutivo conspiró para violar las disposiciones antisoborno de la Ley de Prácticas Corruptas en el Extranjero (FCPA, por sus siglas en inglés) y violarla, así como la Ley de Viajes y los estatutos de lavado de dinero, en relación con un plan que involucraba a funcionarios del gobierno mexicano.
Aguilar fue acusado formalmente por primera vez el 20 de septiembre de 2020 por un gran jurado federal en Brooklyn por conspirar para sobornar a funcionarios ecuatorianos en nombre de Vitol, su empleador. Se declaró inocente.
Está previsto que sea juzgado por el caso de Ecuador en enero.
Una segunda acusación formal en Brooklyn, el 2 de diciembre de 2022, añadió cargos relacionados con un plan separado para sobornar a funcionarios mexicanos en nombre de Vitol, pero esos cargos fueron desestimados el 31 de mayo debido a la falta de jurisdicción adecuada. El 3 de agosto se presentaron en Houston cargos similares derivados del presunto plan de soborno en México.