Se ven pocas posibilidades de regresar a la tarjeta verde en lo que queda del año, pese a gestión del Gobierno de Noboa.
2024 termina y el sector pesquero ecuatoriano ve muy poco probable salir de la tarjeta amarilla impuesta por la Unión Europea (UE) en lo que queda del año, y fija sus expectativas en 2025 para lograr salir de ese estatus en que el país se encuentra desde 2019. Así lo señaló Bruno Leone, presidente de la Cámara Nacional de Pesquería (CNP).
Las apreciaciones de Leone se dan después de mantener una reunión con el ministro de Producción, Comercio Exterior, Inversiones y Pesca, Luis Alberto Jaramillo, en la que abordaron la situación del Ecuador con la tarjeta amarilla que le fue impuesta por la UE como advertencia por considerarlo un país no cooperante en la lucha contra la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada.
La reunión entre Jaramillo y Leone se dio después que el ministro y la viceministra de Acuacultura y Pesca, Ivanova Cereceda, regresaron de una gira por Europa en donde se reunieron, en Bruselas (sede de la UE), con autoridades para gestionar el levantamiento de la sanción. Jaramillo mantuvo reuniones con Charlina Vitcheva, titular de la Dirección General de Asuntos Marítimos y Pesca de la Comisión Europea (DG Mare, por sus siglas en inglés), y con Maroš Šefčovič, vicepresidente ejecutivo de la Comisión Europea, quien además es comisario de Océanos y Pesca y próximo comisario de Comercio. Sin embargo, la sanción no fue levantada.
Tras reunirse con Šefčovič, el 28 de noviembre pasado, Jaramillo posteó en su cuenta oficial de X (antes Twitter) que “las acciones de control y sanción encaminadas a lograr el levantamiento de la tarjeta amarilla impuesta a Ecuador deben ser constantes”, pero no dio más detalles.
Por su parte, Leone señaló que Ecuador espera “salir de esto pronto”. Reveló que faltan pocos detalles para cumplir con la totalidad de los pedidos que hizo la UE.
“Falta el arqueo de unos barcos y algo en relación con los procedimientos en casos de posibles infracciones”, sostuvo el titular de la CNP.
En tanto, dentro de los avances que Ecuador alcanzó en estos cinco años para salir de la tarjeta amarilla está la creación de una nueva ley que reemplazó a la Ley de Desarrollo Pesquero, que estaba vigente desde 1974 y no cumplía los requisitos exigidos por los europeos, mientras que la ley actual cumple con las demandas actuales de la lucha contra la pesca ilegal y el desarrollo del control de la trazabilidad de los productos pesqueros.
De enero a octubre pasado, Ecuador exportó al mercado europeo conservas de atún por US$ 782 millones, con un crecimiento del 36% en divisas y el 44% en volumen exportado, según las últimas cifras del Banco Central del Ecuador (BCE).