El emblemático avión amarillo de la alemana DHL acaba de incluir a Chile dentro de su ruta en la región. Este movimiento es un primer paso de un plan mayor que el proveedor logístico está ejecutando en América para responder a la nueva dinámica generada por los cuellos de botella y que, según advierte Jaime Dacaret, gerente general de DHL Express Chile, seguirá generando importantes desafíos en 2022.
Los cuellos de botella han complicado a la industria logística en el último año y el panorama para 2022 no parece ser muy distinto, razón por la cual muchas compañías están haciendo esfuerzos y adelantando inversiones para que el impacto sea menor. Entre ellas está la alemana DHL, líder mundial de envíos de paquetería, que justamente prevé invertir US$ 360 millones, para aumentar su capacidad y mejorar sus tiempos de entrega en la región Américas.
"El negocio de carga va a seguir con una limitación importante en gran parte del próximo año aún cuando se están haciendo inversiones", reconoce Jaime Dacaret, gerente general de DHL Express Chile, en entrevista con AméricaEconomía. Según el ejecutivo, se viene "otro año complejo" y eso está guiando a las empresas a hacer "sus mejores esfuerzos para que el impacto sea menor".
Y como parte de ese esfuerzo del que habla Dacaret, DHL Express inauguró en Chile una nueva ruta aérea con su emblamático avión amarillo que conecta al país sudamericano con los hub de DHL en Panamá y Estados Unidos, con un vuelo cada 24 horas, lo que le permite reducir los tiempos de tránsito en al menos un día y competir en una mejor posición con los gigantes estadounidenses FedEX y UPS.
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"El COVID-19 vino a acelerar muchos procesos, a catalizar ciertas inversiones que ya se venían haciendo y parte de ese plan era este vuelo. Era un deseo que teníamos desde hace tiempo", comenta el vocero de la compañía en Chile.
Con una capacidad de 40 toneladas de carga útil, el Boeing 767-300F de DHL le permite agregar unas 950 toneladas de capacidad cada semana en el país; además de aportar mejoras significativas en los trámites de aduana que contribuyen a reducir los tiempos de tránsito.
Pero Chile sería solo el comienzo de la expansión de la flota aérea de DHL por la región. Según detalla Dacaret, la compañía planea invertir recursos para reforzar su red aérea de Latinoamérica, como la introducción de nuevas rutas de vuelo directas. "Es un plan mucho más grande que parte por Chile y después irá conectando con otros países", afirma.
La estrategia tiene sentido, considerando que Latinoamérica es la única región cuya capacidad de carga de fletes aéreos sigue muy reducida con niveles por debajo de los registrados antes de la pandemia. Según el más reciente reporte de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA), en septiembre hubo una disminución del 17,1% en los volúmenes de carga en comparación con el mismo período de 2019, un desempeño más débil que el mes anterior cuando la caída fue del 14,5%; mientras que la capacidad se redujo un 20,9% en los niveles anteriores a la crisis.
A inicios de octubre, Alberto Oltra, CEO de DHL Global Forwarding en Sudamérica, revelaba a AméricaEconomía que adaptarse a estos escenarios de alta demanda y capacidades limitadas estaba representando "un desafío" para la compañía y había elevado aún más la competencia por los espacios tan reducidos en la región. "La dinámica del mercado cambió", dijo en su momento.
Actualmente, DHL Express cuenta con unos 80 aviones para la región Américas, de los cuales 16 están dedicados a Sudamérica con vuelos directos desde Estados Unidos a Panamá, Colombia, México, Costa Rica y, ahora, a Chile. La idea -insiste Dacaret- es fortalecer la flota aérea de este lado del mundo para responder a la nueva dinámica que describe Oltra.
E-commerce, catalizador de la inversión
En medio de la crisis global que afecta a la cadena de distribución en todos los países, el boom del comercio electrónico no ha hecho más que añadir volúmen de envíos a las limitadas capacidades de carga. Solo en el primer trimestre, la región Américas tuvo un crecimiento del 33% de los envíos de e-commerce B2C y B2B respecto al mismo período de 2020, según el estudio de DHL "La guía definitiva sobre e-commerce B2B: El fin de lo tradicional". Dentro de esos datos, Chile destaca con creces al reportar un alza del 60% en los envíos, un registro récord para el país.
Esa es la principal razón por la que se suma a Santiago a la ruta que cubre Miami - Ciudad de Panamá. "Es una inversión más de la compañía para responder al gran aumento en volumen de envíos business to business (B2B) y business to consumer (B2C) que la empresa ha manejado en los últimos años", dice Jaime Dacaret. Este crecimiento que reporta Chile, por encima de sus países vecinos, era algo que se venía observando por la apertura del comercio eletrónico e impulsado por una mayor digitalización, agrega.
"El e-commerce ha demostrado la resiliencia que tiene frente a shocks como la pandemia. Sin duda, es un motor del comercio internacional y seguirá impulsando tanto a la economía como al negocio de carga express” destaca el jefe de la unidad de DHL en Chile.
El estudio de la alemana sobre el e-commerce, revela que para 2025 el 80% de todas las interacciones en ventas B2B se realizará a través de canales digitales y alcanzarán unos US$ 20.900 millones a 2027, un 71% más respecto a 2019. "Por eso es fundamental invertir en infraestructura, flota y mejoras en nuestros centros de servicios", señala Dacaret.
Para mantener el nivel de operaciones necesario para responder a este crecimiento, el plan de DHL tiene el foco en mercados como Canadá, Estados Unidos, México, Panamá, Brasil, Perú, Colombia, Argentina y Chile. El objetivo es aumentar la capacidad de la red por casi 30% en la región a 2022.
Jaime Dacaret, gerente general de DHL Express Chile
Por más capacidad con sostenibilidad
Además de expandir la flota e incorporar más vuelos, el ambicioso plan de inversión 2020 - 2022 que DHL está ejecutando en la región está orientado a desarrollar infraestructura y ampliar instalaciones. Hasta la fecha, se han abierto nuevos puntos de venta en Argentina, Colombia, México y Perú; en este último, acaban de inaugurar un nuevo Gateway (puerta de entrada y salida al país de mercancía), que se suma al inaugurado en Canadá y al que están expandiendo en Brasil.
En Chile, la inversión destinada es de US$ 3 millones. Según explica Jaime Dacaret, estos recursos se han empleado para el aumento de la flota, con la incorporación de 30 autos eléctricos, a los que se sumarán otros 12 en diciembre. Con la flota eléctrica en Chile, DHL proyecta una reducción de un 8% de las emisiones de CO2 anuales.
"Hay un compromiso de la empresa en hacer frente al aumento del volumen que se ha venido generando por un mayor consumo global, pero de la mano del medio ambiente", dice Dacaret.
El ejecutivo hace alusión al plan de descarbonización que la alemana lanzó para ser carbono neutral para 2030 por € 7.000 millones (unos US$ 8.000 millones) y que incluye el despliegue de 80.000 vehículos eléctricos para las entregas de última milla a nivel mundial. "La región está trabajando fuertemente en eso y el impacto lo vamos a ver más pronto de lo que pensábamos", sostiene el gerente general de DHL Express.
El resto de la inversión que el proveedor logístico alemán ha destinado a Chile incluye un nuevo centro de distribución en la zona sur del país (con lo que completa cinco: Santiago, Valparaíso, Concepción, Iquique y Temuco) y 10 nuevos puntos de venta para totalizar 100 en todo el territorio.
"El COVID-19 cambió la conducta de compra y está claro que es algo que llegó para quedarse. Por eso, el plan está enfocado en infraestructura, pero también seguiremos invirtiendo en tecnología y en personal para hacer frente a los volúmenes que tendremos", finaliza Dacaret.