El canciller chileno Teodoro Ribera consideró que existen otras razones al margen del derecho internacional que explican la postura del presidente boliviano y no descartó que estas sean “razones políticas internas”.
La exigencia que este martes hizo el presidente Evo Morales en la ONU para que ese organismo exija el cumplimiento del fallo de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) sobre el tema marítimo, que en su criterio plantea que Bolivia y Chile encuentren una solución a esta controversia, recibió una respuesta de su país vecino.
El canciller chileno Teodoro Ribera consideró que existen otras razones al margen del derecho internacional que explican la postura del presidente boliviano y no descartó que estas sean “razones políticas internas”.
“Tenemos un Tratado de 1904 que claramente establece las fronteras entre Bolivia y Chile. Tenemos una sentencia de la CIJ, del 2018, que desestima totalmente las pretensiones bolivianas”, sostuvo este miércoles tras participar en un encuentro de jefes de Estado en el que se analizó la situación de Venezuela, informó el periódico chileno La Tercera.
“Queremos reiterar que el derecho está de nuestro lado. Me imagino que serán otras las razones por las que el Presidente boliviano insiste majaderamente en algo que no tiene sustento”, agregó.
En la misma línea, el excanciller Heraldo Muñoz calificó como “patética” la exposición de Morales, en la que planteó que el fallo de la CIJ no cerró la controversia y llamó a la ONU a “vigilar y exigir el cumplimiento integral de las decisiones de la Corte para que ambos pueblos sigamos negociando de buena fe para cerrar las heridas abiertas”.
“Patética referencia de Gob de @evoespueblo a su fallida demanda marítima en La Haya. Se nota está en elecciones presidenciales. Un gobierno serio habría pedido renuncia de ministros y devolución de plata a abogados contratados ante tamaño desastre” (Sic), escribió Muñoz en su cuenta en Twitter.
Este martes, el también ex canciller y actual senador por Arica, José Miguel Insulza, coincidió en que no quedan temas pendientes y que la ONU no puede intervenir en este caso, aunque abrió la posibilidad de que se reabra el diálogo bilateral para tratar el tema marítimo.
“Aquí no hay ningún compromiso ni ninguna obligación (…); la decisión de la Corte rechazó todos los puntos planteados por Bolivia. La Corte simplemente dijo: ‘si los países quieren negociar, allá ellos’”, afirmó en declaraciones a La Razón.