Un alto funcionario del Departamento de Estado dijo que hay "claras indicaciones" de que hay gente aprovechándose de la agitación que vive Chile y "distorsionándola a través del uso y abuso de las redes sociales desde Rusia.
Washington. El Departamento de Estado estadounidense advirtió este jueves que ha visto señales de "influencia" rusa en las recientes movilizaciones vividas en Chile, cuyo gobierno se ha visto sacudido por dos semanas de protestas y disturbios.
Un alto funcionario del Departamento de Estado dijo que hay "claras indicaciones" de que hay gente aprovechándose de la agitación que vive Chile -provocada por la desigualdad y el alza del costo de la vida- y "distorsionándola a través del uso y abuso de las redes sociales, 'trolleando'".
"Hemos visto indicaciones de actividad rusa apoyando este curso negativo del debate", afirmó el funcionario.
Las declaraciones no fueron comentadas de inmediato por funcionarios chilenos. Rusia ha dicho con anterioridad que no interfiere en los asuntos internos de otros países.
La Casa Blanca dijo anteriormente en un comunicado que "el presidente Trump denunció los esfuerzos extranjeros para socavar las instituciones, la democracia o la sociedad chilenas".
Chile lleva dos semanas sumida en el caos, lo que llevó al presidente Sebastián Piñera a suspender la celebración de la cumbre de los países del Asia Pacífico APEC y de la cita global sobre cambio climático de Naciones Unidas COP25, que debían realizarse en las próximas fechas.
Trump, que esperaba poder firmar un acuerdo comercial con su par chino, Xi Jinping, en el encuentro de la APEC en Santiago en noviembre, dijo el jueves que respalda la decisión de Piñera de no ser anfitrión de las cumbres.
El funcionario del Departamento de Estado aseguró que la interferencia extranjera no fue el único gatillante de la reciente violencia, en la que ardieron autobuses y edificios, se suspendieron los servicios del metro y Santiago quedó paralizada en varias ocasiones.
Sin embargo, añadió que Rusia "intentó exacerbar las divisiones, fomentar el conflicto y actuar, en general, como un boicoteador del debate democrático responsable".