La masacre de este sábado en El Paso, donde fueron asesinadas unas 20 personas, ha puesto a la ciudad en el ojo del huracán de dos de las cuestiones más candentes de Estados Unidos: la inmigración y la violencia armada.
El Paso. El artista había planeado desvelar su mural este domingo en un evento comunitario en El Paso, el último de sus trabajos para celebrar la vida de su hijo asesinado.
El joven, fatalmente herido con otras 16 personas en 2018 en una escuela secundaria de Parkland, Florida, habría cumplido 19 años este domingo, dijo el artista Manuel Oliver. Joaquín Oliver se había dedicado en silencio a la causa de los inmigrantes, dijo su padre, y el artista eligió El Paso porque veía la ciudad fronteriza como una historia de inmigración de éxito.
Pero la matanza de 20 personas este sábado entró en escena, convirtiendo la reunión en el Centro de Defensa del Inmigrante de Las Américas el domingo en otra terrible vigilia.
Oliver estaba al otro lado de la frontera México-EE.UU. en Ciudad Juárez, México, el día anterior, cuando un hombre armado -que ahora se cree que escribió un manifiesto condenando a los inmigrantes- abrió fuego en un Walmart de El Paso.
"No me sorprendió y no puede sorprender a nadie porque hemos hecho muy poco para evitar que esto ocurra", dijo Oliver, quien se convirtió en activista contra la violencia armada después del tiroteo en la escuela secundaria Marjorie Stoneman Douglas.
La masacre de este sábado en El Paso ha puesto a la ciudad en el ojo del huracán de dos de las cuestiones más candentes de Estados Unidos: la inmigración y la violencia armada.
El lugar ha estado durante meses en el centro del debate sobre inmigración a medida ha ido subiendo la temperatura de la campaña presidencial de 2020, con algunos miembros de la administración Trump considerando El Paso la encarnación de una frontera en crisis.
La población de la ciudad, de unos 684.000 habitantes, es de mayoría hispana y gran parte los residentes son ciudadanos estadounidenses, según Data USA. El Paso también tiene fuertes lazos transfronterizos. El centro comercial donde ocurrió el tiroteo es visitado con frecuencia por los residentes de la ciudad mexicana de Juárez, aunque el flujo de migrantes ha disminuido recientemente.
La ciudad es una de las "puertas de entrada" más concurridas para llegar a EE.UU. desde México. Está clasificada en varios sitios web como una de las ciudades más seguras de América y entre los mejores lugares para jubilarse o criar una familia. Según KVIA, una filial local de la cadena de noticias ABC, hay un promedio de 16 asesinatos al año.
La presentación, convertida en vigilia en el centro de inmigrantes, contó con la presencia de una serie de oradores, entre ellos el candidato presidencial demócrata Beto O'Rourke, quien es originario de El Paso y el domingo pidió mayores restricciones en la venta de armas. Las personas encendían velas para los muertos y las colocaba al pie del mural que Oliver acabara de pintar ese día.
"El Paso no está solo", se lee en el mural. "Las Américas son de todos", dice otro. Oliver pintó una imagen de su Joaquín y de la madre del niño, Patricia, con una valla entre ellos, simbolizando a las familias inmigrantes que han sido separadas por los agentes fronterizos en EE.UU.