El canciller Marcelo Ebrard informó este lunes que la estrategia adoptada por México y el despliegue de la Guardia Nacional, así como la aplicación de la Ley de Migración, ha llevado a una reducción en el flujo migratorio de alrededor de 36,2%.
Ciudad de México. México ha reducido desde principios de junio en poco más de un tercio el flujo de migrantes que, atravesando su territorio, buscan llegar a Estados Unidos, dijo este lunes el canciller Marcelo Ebrard.
Ello le permitió evitar la discusión con Washington para convertirse en un tercer país seguro, un acuerdo mediante el cual el país latinoamericano albergaría a quienes soliciten asilo en Estados Unidos si antes pasaron por su territorio, dijo Ebrard.
"México ha adoptado una estrategia conforme a su ley y a sus decisiones, y el despliegue de la Guardia Nacional, así como la aplicación de la Ley de Migración, ha llevado a que tengamos una reducción en el flujo migratorio de alrededor de 36,2%", dijo Ebrard durante una rueda de prensa.
"Dentro de 45 días se va a consolidar la tendencia. Por interés propio, México tiene que regular ese flujo y lo vamos a hacer", agregó.
El funcionario precisó que al 7 de junio el número de migrantes que llegaron a Estados Unidos vía México era de 3,880 al día. Poco más de un mes después, al 13 de julio, la cifra se redujo a 2,652.
México se comprometió con Estados Unidos a desplegar miles de efectivos de su Guardia Nacional además de ampliar el programa Protocolos de Protección a Migrantes (TPP, por sus siglas en inglés), que permite a Estados Unidos enviar a territorio mexicano a solicitantes de asilo -que entraron a su país por México- mientras lo tramitan.
Desde fines de enero -cuando arrancó el programa- hasta el 11 de julio, México ha recibido a casi 20.000 extranjeros solicitantes de asilo de América Latina y el Caribe. Ebrard dijo el lunes que "no esperaban" un incremento de la cifra.
El canciller se reunió este domingo con su homólogo estadounidense, Mike Pompeo, un día antes de vencerse el plazo de 45 días para evaluar los resultados del acuerdo en el que México se comprometió a demostrar avances en sus esfuerzos por frenar la migración hacia Estados Unidos.
Ebrard dijo que ambos volverán a verse en 45 días en Washington y que le pidió a Pompeo que su país realice redadas para disminuir el tráfico de armas estadounidenses hacia México y "un mayor compromiso" de inversión en El Salvador, Guatemala y Honduras.
El gobierno de Andrés Manuel López Obrador sostiene que la receta para frenar la migración está en atender las causas que la generan, como la violencia y la pobreza que azota a los países del triángulo norte de Centroamérica. Para ello ha solicitado miles de millones de dólares en inversión.