A partir del 8 de enero se levanta la medida, que regía desde marzo de 2020. Sin embargo, sí se exigirá un examen PCR negativo tomado 48 horas antes.
La Comisión Nacional de Salud de China informó este lunes (26.12.2022) que a partir del próximo 8 de enero la exigencia de cuarentenas a la entrada del país dejará de estar vigente, poniendo así término a una medida impuesta en marzo de 2020. El movimiento es un paso más en el desmantelamiento de la política de cero COVID que regía en el país más poblado del planeta.
A partir de esa fecha solo se exigirá un test PCR con resultado negativo, tomado menos de 48 horas antes del inicio del viaje, a todos quienes quieran ingresar. La cuarentena que exige aún China, única gran potencia que mantiene esa medida, dura cinco días, seguidos por tres días de observación a domicilio. Esa política ha castigado severamente al sector turístico del país.
La Comisión declaró que el COVID-19 dejará de ser una enfermedad de categoría A, el nivel de máximo peligro y para cuya contención se exigen las medidas más severas, para convertirse en una de categoría B, que contempla un control más laxo al considerársele una enfermedad contagiosa menos peligrosa. De hecho, pasarán de llamarla "neumonía causada por el coronavirus" a "infección por coronavirus".
Masivos contagios
El organismo también notificó que se retirarán los límites al tráfico aéreo internacional en China, que durante dos años se ha restringido a menos del 5 por ciento del que había antes de la pandemia, aunque solo se considerará motivo válido para viajar los negocios o la visita a familiares. La escasez de vuelos provocó un aumento del precio de los pocos billetes disponibles, que llegaron a costar miles de euros por unidad, desatando protestas de los viajeros.
La medida se conoce justo cuando China, que dejó de lado la política del "cero covid” tras masivas protestas ciudadanas, vive un incremento sin precedentes en el número de contagios. Por ejemplo, en Zhejiang las autoridades indicaron que el número de contagios diarios superaba la barrera del millón (en una población local de 65 millones), mientras que en Qingdao, con 10 millones de habitantes, los contagios diarios llegan a 500.000.