Este resultado se atribuye principalmente a menores volúmenes de ventas y una disminución del precio del petróleo y de los márgenes del diésel.
La compañia anotó más de US$ 3.000 millones de utilidad y su ingresos alcanzaron US$ 51.696 millones, un 8,2% más que en 2022.
Por áreas geográficas, los ingresos en Norteamérica crecieron un 7%, hasta US$ 16.774 millones y un 19% en Latinoamérica, hasta US$ 5.830 millones, mientras que en la región EMEA aumentaron un 7%, hasta US$ 8.078 millones, y en Asia Pacífico mantuvo estables las ventas en US$ 5.455 millones.
Las ventas de la compañía retrocedieron en todos los principales mercados geográficos, salvo en Latinoamérica, donde aumentaron un 17,6%, hasta US$ 3.966 millones.
"2023 fue un punto de inflexión para Uber, lo que demuestra que podemos seguir generando un crecimiento sólido y rentable a escala", afirmó Dara Khosrowshahi, consejero delegado de la multinacional.
Por segmentos, los ingresos de intereses netos aumentaron un 18% interanual, hasta los US$ 6.417 millones, mientras que los ingresos no financieros llegaron hasta los US$ 895,9 millones, un 19% más.
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