Como se sabe que las encuestas preelectorales influyen en la decisión de voto, especialmente de los indecisos, la legislación de varios países ha buscado contrarrestar este efecto de las encuestas mediante la prohibición de su publicación a la hora decisiva, al final de la campaña.
En el Perú, el Reglamento del Registro Nacional de Encuestadoras del Jurado Nacional de Elecciones establece que la publicación de encuestas sobre intención de voto en los medios de comunicación puede hacerse hasta el domingo anterior al día de las elecciones, esto en la práctica significa una semana, porque en el Perú las elecciones se realizan en domingo.
Aquí un resumen del tiempo de prohibición para publicar encuestas preelectorales en algunos países:
Argentina: Dos días
Brasil: Quince días
Costa Rica: Dos días
Chile: Cinco días
Ecuador: Diez días
España: Un día
Francia: Un día
Guatemala: Tres días
México: Tres días
Paraguay: Dos días
Perú: Siete días
Venezuela: Siete días
Obsérvese que los países que imponen más tiempo de prohibición legal a la publicación de encuestas preelectorales (Brasil, Perú y Venezuela), son países con sistemas políticos de baja calidad y poco competitivos, donde el nivel educativo y de cultura política de los ciudadanos es pobre.
En algunos países no hay restricción alguna y las encuestas preelectorales pueden ser publicadas hasta el mismo día de las elecciones. Este es el caso de los siguientes países:
Alemania
Colombia
Estados Unidos
Holanda
Reino Unido
Uruguay
Los casos mencionados muestran que en general los países que permiten la publicación de encuestas hasta el mismo día de las elecciones, son países donde los ciudadanos tienen un mejor educativo, mayor cultura política y existen sistemas políticos de alta calidad.
En la legislación peruana la prohibición de publicar encuestas se suma a otras disposiciones sobre actividades que no se pueden realizar durante un tiempo determinado antes del día de las elecciones, como: publicidad electoral (dos días), reuniones públicas partidarias (tres días) y prohibición de venta de alcohol (dos días).
En el caso de las encuestas a boca de urna, y frente a las dificultades que pueden producirse como consecuencia de su publicación, en América Latina hay países como República Dominicana que han prohibido no solo la publicación, sino la realización misma de estas encuestas.
Argentina ha decidido prohibir su publicación hasta tres horas después de concluido el horario oficial de sufragio.
El Salvador permite la publicación una vez concluido el escrutinio, con lo cual se perdería el interés de las encuestas a boca de urna.
Consecuencias de las restricciones a la publicación de encuestas electorales. El impedimento legal de publicar encuestas trae consigo dos dificultades muy importantes:
1. Informados y desinformados:
Los resultados de encuestas sobre intención de voto son publicados por los medios de comunicación internacionales en páginas web de otros países, y están al alcance de aquellas personas que tienen acceso a Internet, donde encuentran mucha información de encuestas prohibidas en el país de origen. Igualmente, mucha información de encuestas circula por correo electrónico, y esto es imposible de controlar.
De esta manera se produce una división entre los ciudadanos. Por una parte aquellos que tienen acceso a encuestas y por otra parte aquellos que no tienen acceso a encuestas, en otras palabras, informados y desinformados. Así se rompe la equidad que debe caracterizar un proceso electoral competitivo y transparente.
2. Falsificación de encuestas:
La proliferación de encuestas falsificadas que son presentadas como ciertas y que circulan clandestinamente y de manera incontrolable y masiva en Internet, páginas web, blogs, redes sociales y correo electrónico.
Así, el propósito aparentemente saludable de evitar que la publicación de encuestas influya negativamente en los votantes en los días previos a las elecciones, se convierte en una realidad negativa y nada sana por la influencia creciente e intensiva de encuestas falsificadas que responden a los propósitos de candidatos y equipos de campaña dispuestos a todo para ganar una elección. Una vez más se comprueba el efecto negativo de las prohibiciones innecesarias.
Esta argumentación da sustento a que en el Perú se debe concluir con la prohibición de publicar encuestas durante la semana previa a las elecciones.