Según un estudio realizado por Kaspersky Lab, descuidos de este tipo representan un 46% de los incidentes relacionados a ciberseguridad en las empresas.
De acuerdo a un sondeo realizado por Kaspersky Lab en conjunto con la consultora chilena CORPA, quienes llevan la delantera en mirar contenido para adultos desde el computador de trabajo son los peruanos (26%), seguidos por brasileños (24%) y mexicanos y argentinos, con un 19%. En tanto, quienes menos aseguran mirar fotos y videos de índole sexual en la oficina son chilenos (14%) y colombianos (12%).
En cuanto a las mujeres, las colombianas son las que más caen en este hábito con un 13%, seguidas por peruanas, con 10%, y mexicanas y brasileñas, con 9%. Al final de la lista están argentinas y chilenas, con 7% y 4% respectivamente.
En promedio, el 19% de los hombres latinoamericanos y el 8.7% de mujeres latinoamericanas, admite ver contenido para adultos en el computador de su trabajo.
Según el estudio, los troyanos bancarios disfrazados de reproductores de video porno ocupan el segundo lugar entre los tipos más extendidos de malware accionado por la pornografía. Le siguen el malware con acceso root y el ransomware.
Por lo general, los ransomware utilizan tácticas denominadas como scareware: programas maliciosos que bloquean la pantalla del PC, mostrando un mensaje de contenido ilegal, bloqueando el dispositivo. Para liberarlo, la víctima debe pagar un rescate.
Junto con esto, el 25% de los latinoamericanos señala que no cuenta con un computador portátil destinado únicamente para trabajar y, si lo tiene, el 30% de los encuestados lo conecta a una red pública de Wi-Fi (cafés, restaurantes y aeropuertos) cuando está fuera de la oficina. Solo el 8% asegura que se conecta a una red virtual privada (VPN) mientras se encuentra en terreno.
“Las prácticas poco rigurosas de algunos colaboradores pueden ocasionar graves daños a las compañías, ya que aumentan el riesgo de filtración de datos corporativos confidenciales”, recalca el director del Equipo de Investigación y Análisis para Kaspersky Lab América Latina, Dmitry Bestuzhev. “Sin embargo, no basta con que los empleados eviten el porno online y las apps sospechosas. Lo importante es mantener siempre protegidos los dispositivos, tanto los de los propios trabajadores, como los de toda la organización”, agrega.
Respecto del uso de dispositivos pertenecientes a empresas, si bien el 30% de los consultados afirma pertenecer a una compañía de más de 300 empleados, solo un 44% responde a una política corporativa de seguridad que resguarda el uso de celulares o computadores portátiles. Otro 35% no se rige por ninguna norma y un 21% desconoce si su compañía tiene alguna implementada. De éstos últimos, el 29% corresponde a jóvenes de entre 18 y 24 años.
“Los empleados, siendo los usuarios finales, son el eslabón más débil de la cadena en ciberseguridad ya que sus hábitos en línea pueden poner en riesgo las redes y los datos confidenciales de las empresas. En ese sentido, una buena solución de seguridad para todos los endpoints conectados a la red corporativa, junto con la capacitación de los empleados, ayudará a proteger la información más sensible de la empresa”, añade Bestuzhev.
El estudio se enmarca en la campaña “Resaca Digital”, promovida por la compañía global de ciberseguridad para concientizar sobre los riesgos a los que están expuestos los internautas cuando navegan sin precaución.