Sólo tres de cada 10 personas de 15 años o más obtuvieron un préstamo de una entidad financiera en el último año.

América Latina es una de las regiones más desatendidas en materia de servicios financieros, de acuerdo con una investigación del Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Y entre los países de la región, México destaca con uno de los niveles más bajos de inclusión financiera.

De acuerdo con información divulgada por el organismo, 26% de las personas mayores de 15 años en la región no cuentan con acceso a servicios financieros formales. En México, esta proporción se duplica a 51% de los adultos que no cuentan con acceso a este tipo de servicios.

Una simetría que está lejos de 3% de la población mayor de 15 años que no cuenta con esta oportunidad en los países de altos ingresos.

El informe FinLac, divulgado durante el lanzamiento de la “ventanilla única” para promover la inclusión financiera entre los más vulnerables de la región, evidenció que sólo tres de cada 10 personas de 15 años o más obtuvieron un préstamo de una entidad financiera en el último año en América Latina y el Caribe.

Esta proporción vuelve a contrastar con el caso mexicano, donde 1,5 personas consiguieron un financiamiento en México en el último año. Para tomar como referencia el caso de las economías avanzadas, refieren que en países como Estados Unidos o Reino Unido, son 6 de cada 10 los que lograron algún tipo de préstamo de una entidad financiera.

"Si logramos cerrar estas brechas, unas 70 millones de personas se verían beneficiadas", señalaron.

REMESAS, ALTERNATIVA DE ENTRADA AL SISTEMA FINANCIERO MEXICANO

En el lanzamiento del informe, el economista jefe del BID, Eric Parrado, explicó que gran parte de las personas que reciben remesas en la región entran a través de un banco o una institución financiera.

Pero suelen sacar casi inmediatamente estos recursos. De manera que una vía para incentivar una mayor inclusión podría ser convencerlos de alguna manera para que mantengan esas entradas en el sistema financiero.

La iniciativa del BID busca educar a la población e incentivarla para aprovechar los beneficios de acceder a los servicios financieros, sobre todo en las poblaciones rurales, entre indígenas, migrantes y pequeñas empresas. En México, nada más, 4,9 millones de hogares reciben remesas.

FINLAC, EL AVANCE EN LA INCLUSIÓN

FinLac es una ventanilla única donde podrán acudir los gobiernos de la región para acompañar a las empresas y promover la innovación en el desarrollo de mercados financieros inclusivos.

Planean liderar estrategias para promover la transformación digital que permita acelerar la inclusión financiera, mejorar los ecosistemas de pago y facilitar las transacciones minoristas rápidas.

Se trata de un hub que puede apoyar a las partes interesadas de los sectores público y privado con sus iniciativas y proyectos para promover la inclusión financiera en América Latina y el Caribe.

El sitio web de FinLac ofrece un panel de datos por país organizados en cuatro áreas: instituciones financieras, infraestructura, obstáculos al acceso y propiedad de productos financieros.